¡Cuidado con los masajes en las playas!

Aunque a simple vista los masajes en la playa pueden parecer un placer, los riesgos para la salud son muchos, como nos explica en Estetic.es el fisioterapeuta Manuel López Viñas.

¡Cuidado con los masajes en las playas!
¡Cuidado con los masajes en las playas!
21 julio 2015 | 14:42 h
En la época vacacional la playa es inamovible en nuestras vidas. Es un paisaje que asociamos a la tranquilidad y disfrute veraniego y al igual que nos puede apetecer una de cerveza, una piña colada, comprar una pulsera o un pareo de entre las múltiples opciones que nos ofrecen los vendedores ambulantes por la arena, también es habitual que nos pregunten si queremos un masaje terapéutico o relajante.

Desde hace algunos años estos masajes practicados por masajistas ilegales, se han puesto de moda en las costas españolas y aunque, como primera impresión nos puede parecer un placer adicional a la tranquilidad playera, los fisioterapeutas han puesto el grito en el cielo en cuanto a sus riesgos… Por este motivo, Estetic.es se ha puesto en contacto con el fisioterapeuta Manuel López Viñas, también vocal del Consejo General de Fisioterapeutas de España, quien se ha encargado de explicarnos los peligros de este tipo de masajes.

“El masaje terapéutico es exclusivo del fisioterapeuta. Nadie que no tenga la titulación debe hacerlos. Aunque los vendan como masajes relajantes, no dejan de ser una terapia para aliviar algún dolor o molestiapor lo que sigue siendo terapéutico”, ha alertado Manuel López.

Según el fisioterapeuta, un masaje terapéutico se practica cuando hay una dolencia o algún problema que pueda afectar a la persona, por lo tanto, lo primero que hay que hacer es apreciar dónde se encuentra la lesión. Respecto a los masajes ambulantes, este especialista señala también que, pese a parecer placenteros, “no lo serán a la larga si te han tocado mal una lesión muscular, ya que seguramente la habrán empeorado”. Y es que un masaje mal hecho puede ser muy perjudicial y favorecer lesiones musculares, o empeorar la que ya existen.

Además, estos masajes carecen de las mínimas medidas higiénico-sanitarias, por lo que los riesgos de infecciones, alergias y contagios aumentan. “Cada vez que una persona se somete a un tratamiento fisioterápico, el profesional tiene que lavarse bien las manos, así como la zona a tratar del paciente y nunca se acaba con una persona y se acude a tratar a otra sin un proceso previo de desinfección. Sin olvidar que si la piel del paciente tiene alguna lesión cutánea probablemente darse un masaje no será lo más adecuado y mucho menos en la arena”, ha aclarado Manuel López.

El fisioterapeuta recomienda acudir a un profesional titulado y comprobar que está colegiado y ha criticado que no exista una ley desde el propio Ministerio de Sanidad que regule estas prácticas, luche contra estos riesgos para los pacientes y contra el “feroz intrusismo” que sufren los fisioterapeutas.


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