La dietista Bárbara Munar (@hablandodenutricion) ha explicado varias razones para tomar fruta durante la menopausia.
La etapa de climaterio es inevitable y, durante esta fase, los cuerpos y hormonas femeninos sufren cambios significativos. Por eso, convienen saber cuáles son los aspectos que caben reforzar. Ante ello, Munar nos explica por qué la fruta es uno de los mejores aliados durante esta fase vital.
La experta desmiente uno de los mitos más resonados en relación a la fruta, y es que no engorda. La fruta es un alimento con una densidad energética muy baja, es decir, con pocas calorías. Pero tiene otros grandes aportes como la fibra o vitaminas.
MÁS FRUTAS, MENOS SÍNTOMAS
La fruta es muy rica en polifenoles, unas sustancias activas que ayudan a reducir la inflamación. A partir de los 40 se produce un descenso hormonal que deriva en un aumento de la inflamación. Esta inflamación empeora y aumenta la cantidad de algunos síntomas como los sofocos, el insomnio o los dolores articulares
TRIÁNGULO DE LA ALIMNETACIÓN +40: MÁS VITAMINAS
La dietista recuerda el triángulo de la alimentación a partir de los 40. Una forma de ilustrar cuáles son los aportes nutricionales que las mujeres deben ingerir a partir de los 40 hacia la transición del climaterio.
La fruta no engorda, tiene pocas calorías y aporta fibra
Y es que la pirámide invertida revela que la aportación de proteínas, vitaminas minerales y grasas debe ser mayor que la de hidratos refinados. Por eso, Munar recuerda que las vitaminas van a ser esenciales durante la menopausia, puesto que ayudan a reducir el estrés oxidativo. Lo que se traduce en una ralentización del envejecimiento a mayor consumo de fruta
TRÁNSITO INTESTINAL
La fruta tiene una importante fuente de fibra, que aporta saciedad y mejora de la microbiota. Gracias a esta última, la fibra nos puede beneficiar en relación al transito intestinal y reforzar el sistema inmunitario, muy esencial a medida que pasan los años para la protección ante enfermedades “oportunistas”, como añade Bárbara.
LA FRUTA Y LAS GLUCEMIAS
La dietista confirma una de las dudas más recurrentes: puedes comer fruta por la noche.
Otra de las preocupaciones generales es con relación a los azúcares que la fruta contiene. Bárbara afirma que la fruta altera las glucemias, pero al igual que cualquier alimento. Así, el nivel de glucosa aumenta en sangre siempre que comemos. Asimismo, la glucosa siempre va a incrementar después de cualquier comida.
No obstante, el conflicto con las glucemias está en cuando se producen picos muy altos o sostenidos durante mucho tiempo. Pero la fruta no los hace porque a pesar de su alto contenido en azúcares -glucosa y fructosa-, su liberación es mucho más lenta debido a la fibra, las vitaminas y el agua que contiene.