Si eres una persona apasionada del deporte, seguro que has escuchado hablar del crossfit. Una disciplina deportiva de alta intensidad que cada vez está ganando más adeptos y no solamente hablamos de personas que se están preparando una oposición.
Se trata de una forma de entrenamiento que combina diferentes ejercicios de una alta intensidad y que tiene una duración aproximada de entre 50 minutos y una hora. Entre los ejercicios que se pueden practicar se encuentran desde ejercicios más cardiovasculares, hasta trabajo de fuerza o de resistencia. Una combinación de diferentes capacidades físicas con el objetivo de fortalecer el organismo.
Es ideal para las personas que buscan bajar de peso, para aquellos que quieren ganar masa muscular y para quienes buscan ganar resistencia.
Sin embargo, pese a tratarse de un deporte que aporta muchos beneficios, también es cierto que resulta bastante peligroso ya que la mala ejecución de los ejercicios puede conducir a diferentes lesiones.
BENEFICIOS
Se ha convertido en una de las disciplinas más solicitadas en los gimnasios y centros deportivos. Aunque muchas personas consideran que se trata de un deporte que está pensado exclusivamente para los deportistas, en realidad se puede practicar a cualquier edad y siempre adaptándose a lo que pide el cuerpo de cada persona.
Un estudio publicado por Sports Sciences for Health ha realizado un análisis sobre esta práctica deportiva y sus beneficios para la salud. Estos son algunos de los más destacados:
Mejoran el estado físico cardiovascular
Ayuda a bajar de peso, ya que se queman muchas calorías durante su desarrollo
Se trata de una forma de entrenamiento que combina diferentes ejercicios de una alta intensidad
Mejora el estado de ánimo y ayuda a hacer frente al estrés
Mejora la capacidad de coordinación y equilibrio
RIESGOS
Como se explicaba anteriormente, este deporte también tiene sus peligros para la salud y es que es muy frecuente que las personas se lesionen mientras practican los ejercicios debido a su alta intensidad. Entre las lesiones más frecuentes se encuentran:
Lesiones de hombro
Lesiones de espalda baja y rodilla
Lesiones graves como la rabdomiólisis por esfuerzo.
Debilitamiento y fatiga