Uno de los debates más latentes que nunca pasa de moda es la dicotomía entre las pesas o el cardio. Dos disciplinas muy populares en el mundo del deporte que tienen sus propios seguidores. Muchos escogen una u la otra con la meta de perder algo de peso, y el debate sobre cuál es más efectivo se vuelve eterno.
Una de las razones principales por las que muchos practican ejercicio es la pérdida de grasa. Y Carlos Bustos, CEO de KMY Studio resuelve las dudas sobre cuál es la estrategia más efectiva.
Lo cierto es que, ninguna de las dos opciones son las mejores para perder peso. La solución más efectiva es hacer un déficit calórico. Como Carlos explica: “Comer menos de lo que estás gastando”. Es una forma de estimular el organismo a recurrir a las reservas de grasa como combustible.
Esto, en combinación con ejercicio, hará más fácil que el déficit dé sus frutos. Además, tiene múltiples beneficios para la salud, tanto física, como mental.
LA COMBINACIÓN MÁS EFICAZ
La dieta y el deporte son la manera más acertada de desprendernos de la grasa acumulada no deseada. No obstante, cada persona tiene unas necesidades y objetivos a los que su rutina y dieta se deben adaptar.
CARDIO O PESAS
En primer lugar, cabe destacar que el cardio se trata de un ejercicio aeróbico que quema más calorías que un entrenamiento de fuerza en el mismo tiempo. Otra de las ventajas, es que se puede mantener el esfuerzo de forma sostenida durante mucho más tiempo. Por eso, hacer cardio tiene unos beneficios muy específicos para el corazón, además de que eleva el flujo energético y permite comer más. Es más, alivia de manera significativa la dieta de pérdida de peso.
Combinar estas dos estrategias es lo que potencia de manera significativa los resultados
Aunque, lo que verdaderamente tiene impacto en la composición corporal es el entrenamiento de fuerza. Pues, aumentar la masa del músculo eleva el metabolismo basal porque el músculo es un tejido muy activo, algo que con el ejercicio aérobico (cardio) no se logra.
El músculo necesita energía para mantenerse tonificado. Así, el esfuerzo físico con cargas ayuda a perder tanto grasa corporal como visceral.
POR SEPARADO
Sin embargo, si analizamos las dos prácticas por separado, veremos que ambas son equivalentes a la hora de perder peso. Pero combinar estas dos estrategias es lo que potencia de manera significativa los resultados.
Carlos insiste en que no debemos polarizar, sino que conviene sumar. Y es que, existen sinergias entre los dos tipos de entrenamiento. A raíz de esto, Bustos recomienda realizar entre 3 y 4 sesiones de fuerza semanales y una o dos de cardio, también a la semana.
Una alternativa es incluir entre 15 y 20 minutos de cardio después del entrenamiento de fuerza, pero es preferible hacerlo por separado.
PUESTA EN FORMA
Desde KMT Studio aclaran que la resistencia, la movilidad, la flexibilidad, la agilidad y la velocidad también son indicadores de la forma física. El porcentaje de grasa puede variar según la edad o sexo. Y es que, en el caso de las mujeres el porcentaje de grasa es de 25%, mientras que para los hombres es menos de un 15%.