Son numerosas las texturas que podemos encontrar en los cosméticos: spray, bruma, crema, leche, mousse, bálsamo, sólido, etc. Elegir entre una u otra depende sobre todo de la funcionalidad del cosmético, de la época del año que sea y de la parte del cuerpo donde te lo vayas a aplicar. No necesitarás la misma textura en una crema de cara, en un contorno de ojos o en los pies. Así como también variará si es invierno o verano y necesitamos una bomba de hidratación o un extra de frescor.
En cuanto empieza a hacer calor nos gusta lucir un bronceado saludable, pero para conseguirlo, es tan importante proteger la piel durante el sungazing como cuidarla a posteriori, ya que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, que más expuesto está a la radiación solar, por lo que necesita un producto reestructurante, calmante y con mucha hidratación.
Por eso, lo ideal es que los aftersun sean en formato bálsamo, ya que las brumas o sprays no penetran hasta las capas más profundas de la piel. La leche corporal tiene una textura mucho más ligera y fluida que otros tratamientos, absorbiéndose rápidamente, lo que es muy cómodo para el día a día, pero no si has tenido una exposición solar elevada, que necesitas más consistencia.
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, que más expuesto está a la radiación solar, por lo que necesita un producto reestructurante, calmante y con mucha hidratación
La textura de las cremas es más fundente, se aplica también fácilmente y aunque es más nutritiva que la leche, los bálsamos lo son más aún, porque están compuestos por mantecas y varios aceites, por lo que su textura es más densa y suelen utilizarse para reparar la piel y no tanto como cuidado cotidiano. Es ideal para tratar las pieles muy secas y agredidas.
Por ello, el producto aftersun más vendido en perfumerías es Bálsamo After sun Hidratante de Collistar. Gracias a su rica consistencia, este preciado bálsamo es ideal para los que quieren un extra de suavidad y bienestar. Su secreto reside en una fórmula basada en aceites vegetales, vitaminas, aleo, glicerol y fitoextractos con una acción intensa nutritiva e hidratante.
Se trata de una emulsión rica, nutritiva y restauradora que aporta confort a la piel y garantiza una suavidad extra. Además, ayuda a fijar y a prolongar el bronceado.
Lo ideal es aplicarlo después de la ducha con la piel húmeda, para que penetre con mayor facilidad a las capas más profundas de la piel y que se absorba de forma óptima.