Muchos son los pasos que consideramos imprescindibles en nuestra skincare, uno de ellos es la exfoliación. Todas sabemos que exfoliar la piel de manera regular es un paso clave para mantenerla saludable.
Este paso permite despejar nuestro cutis y eliminar las células muertas e impurezas para dejar la piel más luminosa y preparada para los tratamientos nutritivos. Pero Foosh Exfoliante Facial va más allá convirtiendo este gesto en una experiencia sensorial rica y suave con una fórmula con un 97% de ingredientes de origen natural, con micropartículas de pepitas de uva y extracto de Quercus.
Todas sabemos que los beneficios de exfoliar nuestra piel son muchos y nuestro rostro luce más bonito, pero también debemos tener cuidado, pues existen riesgos que debemos tener en cuenta:
- Lo primero a lo que debemos prestar atención es al exfoliante que vamos a utilizar, es muy importante que se adapte a nuestro tipo de piel para cumplir los objetivos que buscamos.
- Es muy importante no utilizar un exfoliante corporal en el rostro porque son demasiado agresivos para la piel y está contraindicado.
- Después de exfoliar la piel, es muy importante no exponernos directamente a la radiación solar, pues esta podría causarnos daños.
EXFOLIANTE FACIAL
Foosh Exfoliante Facial se trata de un producto cremoso y fundente, con un 97% de ingredientes naturales que exfolia con suavidad y eficacia. Su textura cremosa facilita un masaje efectivo y suave, que deja la piel nítida y profundamente nutrida sin sensación grasa al aclararse.
Para la pieles más secas, sensibles o finas, se recomienda su uso entre una y dos veces a la semana, mientras que las pieles grasas, gruesas o asfixiadas, pueden usarlo tres veces o en días alternos hasta recuperar el equilibrio gracias a su acción regenerante natural.