La musculatura de la faja abdominal (transverso) y del suelo pélvico están diseñadas para ejercer de sostén de los órganos situados en la cavidad que envuelven.
Sin embargo, en nuestra vida diaria tenemos constantes aumentos de la presión abdominal. Reír, toser, estornudar, cargar peso, hacer deporte, tener estreñimiento, la obesidad, embarazos, la menopausia... Todo ello hace que nuestra faja abdominal y la musculatura perineal puedan verse afectadas y dejen de realizar correctamente sus funciones de sujeción.
En este sentido, Natalia Murciano, directora de Bikram Yoga Spain Pozuelo, destaca que, ''los abdominales hipopresivos nos ayudan a devolver esta función reprogramando la respuesta muscular''. Por ello, en Bikram Yoga Spain han creado una terapia abdominal restaurativa con calor: el método TARC.
La musculatura de la faja abdominal (transverso) y del suelo pélvico están diseñadas para ejercer de sostén de los órganos situados en la cavidad que envuelven
Este tipo de abdominales nos ayudan a fortalecer el suelo pélvico y a prevenir y mejorar problemas como la incontinencia urinaria, prolapsos, diástasis, problemas digestivos o dolor de espalda, entre otros.
Además, según la directora de Bikram Yoga Spain Pozuelo, ''logra múltiples beneficios como, por ejemplo, reducción del perímetro abdominal, prevención de hernias inguinales, abdominales y vaginales, prevención y mejora de lesiones musculares y articulares, aumento del rendimiento deportivo y una mejora de la función respiratoria y una musculatura abdominal''.
Por otra parte, Elena Olmo, directora del centro Bikram Yoga Spain Montecarmelo, señala que en los abdominales hipopresivos ''primero trabajamos musculatura pélvica creando un acondicionamiento optimo del suelo pélvico y, posteriormente, se trabaja un refuerzo abdominal''.
En lo que se refiere a los abdominales tradicionales, si no se hacen adecuadamente, ''pueden generar un aumento de presión hacia el periné. Si este no está lo suficientemente tonificado puede provocar disfunciones del suelo pélvico. A su vez, los abdominales hipopresivos reducen el estrés en la zona lumbar produciendo una descarga y trabaja reforzando la estabilidad de la columna en actividades tan cotidianas como correr, coger peso o toser'', explica Elena Olmo.