Las intervenciones de pecho son una de las demandas más comunes dentro de la cirugía estética de las mujeres, según la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética). No obstante, aunque el aumento es la más conocida, también existen otras cirugías, como levantamiento de mamas, lifting o reducción.
Así, sea cual sea el motivo de pasar por quirófano, lo primero que hay que hacer es elegir a un buen profesional, lo que incidirá no solo en el resultado, sino en el proceso de recuperación.
En este último aspecto, el postoperatorio, la Sociedad Americana de Cirugía Plástica ofrece cuatro consejos para una recuperación rápida y lo menos dolorosa posible:
1. PLAN DE ASISTENCIA. Al tratarse de una cirugía mayor, los primeros días es normal sentirse dolorida y cansada. Durante estos días no se debería levantar objetos pesados, ni conducir. Por eso una recomendación es contar con una persona que te ayude con las tareas del hogar y los niños durante las primeras 24 o 72 horas.
2. MANEJO ADECUADO DEL DOLOR. Es común experimentar una molestia leve o moderada inmediatamente después de una intervención de aumento de pecho, por eso algunas mujeres sentirán presión y opresión. Para aliviar estos síntomas su médico las recetará un medicamento durante unos días. Lo mejor es estar prevenida y tener al alcance los medicamentos necesarios.
3. DESCANSO ADECUADO. Descansar lo suficiente durante la recuperación es una obviedad, pero para algunas personas no es tan fácil hacerlo. Lo que se puede hacer es tener una habitación tranquila, así como una cama cómoda para descansar durante los primeros días, contar con una buena almohada con la que mantener una postura adecuada y recopilar algunos libros o revistas para pasar el tiempo.
4. LUZ, ALIMENTOS SALUDABLES Y AGUA. Antes de dirigirte al centro quirúrgico para tu aumento de pechos, debes abastecer tu cocina con comida fácil de preparar y mucho agua para no deshidratarse. El primer día al llegar a casa, lo normal es tener náuseas debido a la anestesia o no tener mucho apetito, por lo que los alimentos suaves y ligeros son los mejores. Así, es recomendable tener una variedad saludable de alimentos a mano, para dar al cuerpo energía y fuerza.