Las vacaciones de Semana Santa son uno de los mejores periodos del año, ya que durante unos días dejamos atrás el trabajo, las obligaciones y las rutinas. Sin embargo, también solemos dejar atrás algo muy importante: el cuidado de nuestra boca.
Y es que, según la doctora Conchita Curull, una de las cosas que hacemos mal cuando nos vamos de viaje es dejarnos el cepillo eléctrico en casa. ''Es un error, porque la batería del cepillo eléctrico dura bastante, aunque no lo tengamos enchufado'', señala Conchita Curull.
Si estamos todo el día fuera y no nos podemos cepillar, podemos usar chicles de xilitol, ya que neutralizan el pH de la boca y tienen este efecto preventivo que podría tener un buen cepillado
Por tanto, si no lo llevamos y optamos por el cepillado manual, ''hay que hacer especial hincapié e intentar cepillarnos mejor y más tiempo, no hacerlo deprisa y corriendo'', explica la doctora.
Asimismo, otra cosa que hay que tener en cuenta es que no podemos olvidarnos de pasar el hilo de cera o utilizar cepillos interdentales.
Por otra parte, ''si estamos todo el día fuera y no nos podemos cepillar, podemos usar chicles de xilitol, ya que neutralizan el pH de la boca y tienen este efecto preventivo que podría tener un buen cepillado'', añade Conchita Curull. Por el contrario, ''si no tenemos chicle o no queremos usarlo, podemos comer una manzana, ya que tiene un efecto arrastre'', comenta la doctora.
A su vez, si no podemos seguir una rutina estricta de higiene dental, debemos procurar llevar a cabo una dieta baja en azúcares. Para ello, debemos controlar el consumo de caramelos, chocolates, bombones... beber mucha agua y moderar el consumo de alcohol y tabaco. Si no bebemos una cantidad suficiente de agua, no tendremos la boca hidratada debido a la falta de saliva y, finalmente, estaremos más expuestos a la aparición de caries.