Las celebrities también son personas humanas y, como cualquier otro de nosotros, tienen sus penas y glorias. Aunque su estatus pueda hacerlas algo más distantes, no están exentas de sufrir enfermedades y muchas veces aprovechan su voz para contribuir a la visibilización de sus problemas de salud.
Miley Cyrus ya habló de sus problemas de arritmia en la autobiografía que lanzó en 2009, ‘Miles to Go’, y desde entonces ha tenido muy presente su enfermedad. En aquel momento, con 17 años, la cantante y actriz confirmaba que sufría taquicardias, un problema crónico y que aunque en su caso no eran peligrosas, sí que le ocasionaban molestias y no podía dejar de pensar en ellas cada vez que se subía a un escenario.
Para acercarnos un poco más de lleno a la realidad de la cantante de ‘Flowers’, desde Estetic.es explicamos qué son las arritmias y qué peligros pueden ocasionar a la salud.
¿POR QUÉ SE PRODUCE LA ARRITMIA?
Una arritmia es un trastorno del ritmo cardíaco en el cual el corazón late de manera irregular, demasiado rápido o demasiado lento. Esto se debe a una alteración en la generación o conducción del impulso eléctrico que controla ese ritmo cardíaco, y puede deberse a las alteraciones en el sistema nervioso encargadas de producir las señales eléctricas. En cualquier caso, podemos clasificarlas en dos tipos:
- Taquicardias: se producen cuando el ritmo cardíaco es rápido y va a más de 100 latidos por minuto.
- Bradicardias: el ritmo cardíaco es lento, con menos de 60 pulsaciones por minuto.
En la mayoría de los casos las taquicardias pueden controlarse con medicación
Podemos diferenciar varios tipos de taquicardias, atendiendo a la organización y velocidad de sus latidos:
- Fibrilación auricular: en este caso, el ritmo cardíaco es irregular y a menudo rápido.
- Fibrilación ventricular: se trata de una arritmia potencialmente mortal, en la que los ventrículos laten de forma rápida e irregular.
- Taquicardia ventricular: el ritmo cardíaco es anormalmente rápido y se origina en los ventrículos (las dos cámaras inferiores del corazón), pero generalmente es regular.
- Flutter auricular: aquí el ritmo cardíaco es rápido y regular, pero las aurículas (las dos cámaras superiores del corazón) se contraen demasiado rápido.
TRATAMIENTO DE LAS ARRITMIAS
El tratamiento de una arritmia depende de su causa de origen y de la gravedad de los síntomas. En algunos casos, si la arritmia es leve y no causa síntomas significativos, puede no ser necesario un tratamiento, pero en otros casos, éste puede incluir medicamentos antiarrítmicos que ayuden a controlar la frecuencia cardíaca y el ritmo cardíaco.
Algunos pacientes necesitan cardioversión eléctrica, una técnica por la que se aplica una corriente eléctrica controlada al corazón para restablecer el ritmo cardíaco normal. También se pueden tratar con ablación por catéter, un procedimiento en el que se inserta un catéter a través de una vena en la ingle o el brazo y se guía hasta el corazón para destruir pequeñas áreas de tejido cardíaco causantes del problema.
En las taquicardias el ritmo cardiaco es superior a las 100 pulsaciones por minuto
Para ayudar a controlar el ritmo cardiaco, en ocasiones se implantan dispositivos como un marcapasos o un desfibrilador implantable, y en situaciones extraordinarias, se requiere de cirugía para tratar la arritmia. En cualquier caso, la mayoría pueden tratarse con medicación y el paciente podrá desempeñar una vida normal.
Sin embargo, algunas arritmias son más graves y pueden requerir de un seguimiento regular con un cardiólogo, ya que podrían provocar complicaciones tales como insuficiencia cardíaca, accidente cerebrovascular o muerte súbita. Llevar un estilo de vida saludable para controlar los factores de riesgo, como la hipertensión arterial, la diabetes, el tabaquismo y la obesidad, es fundamental para mantener una buena salud cardiovascular.