Sequedad de piel, placas enrojecidas, mucho picor y, en algunos casos, imposibilidad para conciliar el sueño. Así es el día a día de muchas personas que sufren de dermatitis atópica, una enfermedad clásicamente asociada a la infancia pero que también puede aparecer en el adulto y generar un deterioro importante de su calidad de vida.
“La dermatitis atópica es una enfermedad de origen alérgico que afecta a la piel, provocando picor, enrojecimiento o irritación”, así define Mónica García Bodini, bioquímica y fundadora de Green Frog, a esta enfermedad que afecta a buena parte de la población española.
"El aloe vera es una de las plantas que más propiedades tiene en muchas afecciones"
La bioquímica, además, ha insistido en que hay diversos síntomas, como la sequedad y la descamación de la piel, que se ven más afectados en épocas como el otoño, en la que predomina un clima seco y abusamos de los sistemas de calefacción.
Picor, ampollas, heridas… ¿qué podemos utilizar para calmar estos síntomas tan molestos?
BENEFICIOS DEL ALOE VERA
En este punto, Bodini ha destacado el aloe vera, a su juicio, “una de las plantas que más propiedades tiene en muchas afecciones, entre ellas la dermatitis atópica”.
“Teniendo en cuenta que el aloe vera está formado en su mayoría por agua, su efecto hidratante es altísimo”, ha afirmado. Por ello, “la aplicación de aloe vera en las zonas afectadas de la piel ayudará a mantenerla hidratada y a mejorar los síntomas de la dermatitis atópica”.
En este punto, la fundadora de Green Frog ha destacado sus cremas Vera Green ya que “además de aloe vera, contienen otros elementos naturales como el kudzu o la centella asiática que, en conjunto, se complementan reforzando sus propiedades”.
"Gente que sufre de acné o psoriais son absolutos adeptos de esta planta"
De este modo, “aquellas personas que sufren de dermatitis atópica no solo tendrán una piel más hidratada, sino que verán reducidas otras molestias como los picores o la irritación”, ha añadido.
Es por ello que el aloe vera es uno de los mejores aliados para conseguir una piel tersa, luminosa y, lo más importante, sana.
Además, según ha detallado Mónica Bodini “no solo está recomendado para la dermatitis atópica, sino que gente que sufre de acné o pacientes de otras enfermedades cutáneas como la psoriasis son absolutos adeptos de esta planta”.
Igualmente, las personas que no tienen ningún problema en la piel, también lo pueden usar. “Es muy aconsejable aplicar diariamente cremas elaboradas a base de aloe vera ya que una vez pruebas el aloe vera, no vas a querer dejar de usarlo”, ha dicho.
VENTAJAS E INCONVENIENTES
Las ventajas del aloe vera son innumerables tanto para la piel como para nuestro cuerpo en todo su conjunto.
“Muchas personas desconocen que el jugo del aloe vera también se puede beber. De hecho, para casos como la dermatitis atópica es aconsejable compaginar el tratamiento de las cremas con los jugos”, ha puntualizado la experta, quién ha asegurado que “aplicando la crema entre una y cinco veces al día y tomando de uno a tres vasitos de 50 mililitros de jugo de aloe, los pacientes van a notar una mayor mejoría”.
Por el contrario, para Mónica, “el único inconveniente del aloe vera es la aloína, una sustancia amarillenta presente entre la piel y la pulpa de la hoja y que puede provocar diarreas e irritaciones”.
“Por ello, siempre que utilicemos algún producto hecho a base de aloe vera es importante cerciorarse de que esté libre de aloína”, ha comentado.
EN CUALQUIER ÉPOCA DEL AÑO
Respecto a la época del año, Bodini ha puntualizado que “la aplicación de las cremas de aloe vera está indicada para cualquier época del año, teniendo efectos beneficiosos en cada una de ellas”.
“En invierno y otoño, cuando nuestra piel suele estar más seca, nos vendrá genial el efecto hidratante del aloe vera, y en otras épocas más calurosas, como la primavera o el verano, la aplicación de aloe puede servir como aftersun, como refrescante de la piel e incluso como desodorante”, ha detallado.
En cuanto a la aplicación del tratamiento, “cualquiera es más efectivo durante las horas nocturnas ya que es cuando nuestro cuerpo está más relajado y la piel aprovecha para regenerarse”.
A pesar de ello, para la bioquímica “cualquier momento es bueno, y un mayor o menor número de aplicaciones diarias dependerá de las necesidades de cada caso”.
No obstante, “no existen tratamientos milagrosos que aporten soluciones de un día para otro sino que lo importante es ser constante en la aplicación para comenzar a ver resultados”.