La fisioterapia busca obtener el máximo nivel de funcionalidad de cara a paliar los síntomas y los dolores causados por algunas patologías o lesiones determinadas. Una alternativa terapéutica no farmacológica conocida por todos en cuanto a las diversas técnicas de masaje que reúne, pero que en realidad van mucho más allá en lo que a métodos se refiere...

En este sentido, dentro del marco de la primera jornada de Termatalia 2017, la Feria Internacional de Turismo Termal, Salud y Bienestar que se está desarrollando estos días en la ciudad gallega de Orense y desde donde Estetic.es no está perdiendo detalle, el fisioterapeuta Delfín Campos Castro, director de Neuroburgas, ha explicado los diferentes usos y técnicas del agua termal aplicadas a este campo.

“Las propiedades de los oligoelementos que contiene el agua minero-medicinal benefician a aquellas personas que padecen escaras, eccemas o dermatitis”

Y es que, según este especialista, la fisioterapia acuática siempre ha jugado un papel importante, pero más aún si lo que hay dentro de la piscina es agua termal. “La utilizamos especialmente en pacientes neurológicos, pero también pueden beneficiarse de las propiedades de los oligoelementos que contiene el agua termal aquellas personas que padecen escaras, eccemas o diferentes tipos de dermatitis”.

El tipo de agua termal utilizada para sus terapias las elige acorde a la dolencia, ya que trata desde artritis y reumas, hasta afecciones de la piel y dolores musculares. “Existen aguas sódicas y sulfuradas para los cuadros de estrés y ansiedad, pero por ejemplo, las sulfatadas tienen una acción diurética, mientras que las bicarbonatadas mejoran los problemas digestivos”, apunta.

BENEFICIOS Y EFECTOS FISIOLÓGICOS DE LA HIDROTERAPIA

Por otra parte, Delfín Campos asegura que la ventaja de actuar en una piscina con agua minero-medicinal si se compara con los resultados de las mismas terapias en una piscina de agua con cloro radica en los efectos fisiológicos del agua que se ha nutrido previamente con los minerales de la tierra:​

1. Favorece la circulación superficial y el aporte sanguíneo a los músculos.

2. Incrementa el metabolismo general.

3. Disminuye la hipersensibilidad de las terminaciones sensitivas.

4. Relaja la musculatura de forma generalizada.

5. Mejora el estado anímico.

“Eso sí, todo ello depende de la temperatura del agua, la intensidad del ejercicio, y por supuesto, la duración del tratamiento”, apunta también el fisioterapeuta.

ACTIVIDADES Y MÉTODOS

En este contexto, los distintos métodos y actividades a las que recurre la fisioterapia acuática se basan en el concepto de “hidrocinesisterapia”, es decir, el movimiento que se puede llevar a cabo dentro del agua aprovechando sus propiedades térmicas y mecánicas. Entre ellos, el director de Neuroburgas destaca los siguientes por tratarse de los más efectivos en rehabilitación y afecciones de la piel:

- Método Halliwick:es una técnica de natación que ha pasado a convertirse en una técnica de rehabilitación para perder el miedo y ganar soltura dentro del agua en cuatro fases.

- Watsu: consta de una serie de movimientos pasivos de flexión y extensión con tracción y rotación basados en el zen Shiatsu, que además proporcionan un efecto de relajación.

- Bad Ragaz: también conocido como el “método de los anillos”. Se trata de una terapia acuática basada en la facilitación neuromuscular propioceptiva para la rehabilitación física.

- Al Chi: proviene de Japón y consiste tanto en una forma de ejercicio físico-acuático como en una técnica de relajación que favorece la rehabilitación.