No es una decisión superficial. El limpiador que utilices diariamente puede afectar al grado de luminosidad e hidratación de tu rostro. Aunque el objetivo del mismo sea retirar células muertas, suciedad y contaminación acumulada, elegir uno inadecuado o con ingredientes que no respeten tu piel podría arrastrar los aceites naturales que la protegen, comprometiendo su función barrera, y como resultado, la tez se mostrará seca, opaca y falta de vida.
Garnier tiene la solución con su nueva agua micelar con agua de rosas. Limpia aportando resplandor, gracias a una fórmula que contiene las eficaces micelas de toda la gama, las cuales atraen las impurezas como un imán creando una esfera alrededor de ellas. Luego solo es necesario pasar un disco reutilizable para retirarlas suavemente de la piel sin necesidad de frotar.
Pero, lo que verdaderamente hace especial este agua micelar es que contiene un agua floral de rosa de damasco obtenida por destilación con vapor de sus pétalos. Conocida y valorada por sus propiedades calmantes e iluminadoras, esta flor ayuda a que el rostro vea su hidratación y luminosidad potenciadas.