Dolores de cabeza intensos y pulsátiles, náuseas, vómitos y una sensibilidad extrema a la luz y el sonido. ¿Te suenan estos síntomas? Si es así, probablemente padezcas o conozcas a algún paciente de migraña, una afección neurológica que puede llegar a afectar en gran medida a la calidad de vida. La buena noticia es que hay tratamiento, aunque generalmente este se centra en medicamentos y cambios en el estilo de vida. Ahora, el abanico de terapias se amplía gracias a un nuevo método quirúrgico innovador.
Se trata de la cirugía de migraña, un procedimiento individualizado que desarrolla el equipo médico de IMAGN INSTITUTE, bajo la dirección del Dr. Ahmad Saad, cirujano especializado en cirugía de migraña. Este nuevo método promete reducir de forma significativa la frecuencia, duración y gravedad de las migrañas. Por ejemplo, algunos estudios han demostrado que cerca del 90% de los pacientes experimenta una mejora notable o, incluso, la eliminación completa de esta incapacitante condición. Los resultados pueden ser inmediatos o desarrollarse a lo largo de unos meses.
Algunos estudios han demostrado que cerca del 90% de los pacientes experimenta una mejora notable o, incluso, la eliminación completa de esta incapacitante condición
¿EN QUÉ CONSISTE EL PROCEDIMIENTO?
La cirugía implica descomprimir aquellos nervios identificados como desencadenantes de la migraña. El proceso comienza con una evaluación detallada, que puede ser presencial o virtual. En la evaluación, que ayuda a identificar los desencadenantes específicos de cada paciente, se recopila información sobre la frecuencia, duración y síntomas específicos de las migrañas.
El siguiente paso es el propio procedimiento en sí, que se realiza bajo anestesia local o general y que suele ser ambulatorio. Para descomprimir los nervios que contribuyen al inicio de las migrañas, el cirujano hace pequeñas incisiones en el cuero cabelludo, sin penetrar el cráneo ni llegar al cerebro.
En lo relativo a la duración de la intervención, esta depende del número de puntos a tratar, y toma en torno a 15 minutos por área. Al finalizar, los pacientes pasan a una zona de recuperación antes de regresar a casa. La recuperación completa suele permitir a los pacientes volver a sus actividades habituales en una semana, pero se recomienda evitar el ejercicio extenuante por un tiempo adicional.
La recuperación completa suele permitir a los pacientes volver a sus actividades habituales en una semana
¿QUIÉN PUEDE SOMETERSE AL TRATAMIENTO?
Este innovador enfoque es una alternativa para aquellos pacientes cuyos síntomas no responden a los tratamientos habituales, así como para aquellos que experimentan efectos secundarios no deseados de los medicamentos. En general, un buen candidato es aquel que cumple con los siguientes criterios:
- Diagnóstico de migraña por un médico de cabecera o neurólogo.
- Ineficacia de otras terapias o efectos secundarios graves.
- Impacto significativo de las migrañas en la calidad de vida.
- Estado de salud general estable.