Seguro que todos, en algún momento de nuestra vida, hemos tenido que hacer frente al problema del acné. Esta afección, que se caracteriza por la aparición en la piel de espinillas, granitos o puntos negros, puede llegar a ser una verdadera 'comedura de cabeza' para quienes lo sufren.
Y es que, a pesar de que el acné puede afectar a todo el mundo, ''en la edad adulta es más habitual en las mujeres, especialmente entre los 25 y los 50 años. De hecho, se calcula que hasta un 45% de las mujeres lo padecen. El motivo principal lo podemos encontrar en que es un periodo de tiempo en el que el factor hormonal está muy presente en las mujeres'', señala el doctor Miguel Sánchez Viera, director del Instituto de Dermatología Integral.
Además, hay que tener en cuenta que el acné adulto suele desencadenarse o agudizarse en los momentos en los que existen picos hormonales, como el periodo menstrual, el embarazo y la menopausia. No obstante, existen tratamientos que pueden ayudar a eliminar este problema para siempre. Sin embargo, hay que dejar claro que estos deben ser individualizados en función de cada caso y ser tratados siempre por un dermatólogo.
Esta afección, que se caracteriza por la aparición en la piel de espinillas, granitos o puntos negros, puede llegar a ser una verdadera comedura de cabeza para quienes lo sufren
''Solo conociendo el origen del acné podrá ponerse remedio. El siguiente paso será eliminar la inflamación, el enrojecimiento y la supuración. Para ello, utilizamos una combinación de fármacos (aplicados directamente en la piel o tomados vía oral) con el uso de láser PDL (Pulsed Dye Laser) o Terapia Fotodinámica'', explica el doctor Sánchez Viera.
Así pues, ambas tecnologías actúan eliminando las bacterias y disminuyendo la inflamación de la glándula sebácea. ''También se puede acudir a la microdermoabrasión, que ayuda a eliminar los tapones de grasa que obstruyen los poros, aplicando a continuación sustancias activas que actúan en profundidad en la piel, devolviéndole un aspecto saludable'', afirma el doctor.
Asimismo, también existen tratamientos que permiten eliminar las cicatrices que ha dejado el acné, en caso de que lo hubiera hecho.
''Cuando las cicatrices hayan aparecido se analizará cómo son para elegir el tipo de láser a emplear. Para las denominadas atróficas, que son las que tienen forma de picotazo con hundimiento de la piel, lo mejor son los láseres fraccionales ablativos (CO2 y Erbio) y los láseres no ablativos. Estos producen microzonas de calentamiento en las zonas más profundas de la piel generando colágeno y renovando la superficie, haciendo que las cicatrices vayan desapareciendo'', expone Miguel Sánchez Viera.
En el caso de las cicatrices hipertróficas, ''los tratamientos más indicados son láseres de Colorante Pulsado, Neodimio Yag y el KTP. Estos disminuyen la inflamación y sustituyen el colágeno anómalo por colágeno normal. Además, si el acné es muy severo combinamos estos tratamientos con microinyecciones de fármacos en la zona afectada para conseguir un resultado más satisfactorio'', concluye el doctor.