Diferentes estudios científicos demuestran que los niveles elevados de cortisol están relacionados con un aumento de la frecuencia cardíaca, tensión arterial, sudoración excesiva, falta de memoria, irritabilidad, falta de concentración, baja productividad, problemas de fertilidad, debilitación del sistema inmunológico, caída del cabello…
“Existe una estrecha relación entre los problemas que pueden aparecer en la piel y el estado de salud general del organismo”, comenta Eva Raya, co-creadora de Alice in Beautyland.
El exceso de cortisol y adrenalina produce un desequilibrio hormonal en estrógenos y testosterona que afecta negativamente a la piel. Entonces comienza a aparecer sequedad, descamaciones y picores. La sensibilidad se acentúa y las irritaciones aumentan.
El acné, el eczema y la psoriasis se recrudecen. La dermatitis atópica puede empeorar, e incluso, poco a poco, la piel pierde luminosidad y se va tornando hacia una tonalidad más gris, opaca y apagada. Una larga lista de efectos contraproducentes que ponen en riesgo nuestra salud física y mental y que, además, generan envejecimiento prematuro. Pero, ¿cómo combatir el estrés?
La relajación física y mental es imprescindible para disfrutar de una buena calidad de vida. Es importante convertir, día a día, los pensamientos negativos en positivos. Generar pensamientos positivos conlleva aumentar el bienestar. Intentar positivizar las pequeñas adversidades de la vida es complicado, pero resulta muy beneficioso. Mantén constantemente una sonrisa. Elevará tu estado de ánimo y el de las personas que te rodean.
En este sentido, las fórmulas de Alice in Beatyland ofrecen activos ventajosos para tu mente, capaces de proporcionar a tu vida momentos de relax. Ylang-ylang, aguas florales de rosa damascena y azahar, salvia y rhodiola, e ingredientes procedentes de cultivo orgánico, por lo que contienen el máximo de sus cualidades terapéuticas y embellecedoras.