Hace menos de un mes que María Pombodio a luz por cesárea a la pequeña Vega, que se adelantó un mes a su fecha prevista de nacimiento. A pesar de haber sido un parto bastante complicado, la influencer ya ha sorprendido a sus seguidores por la tripa tan plana que está consiguiendo en un tiempo casi récord.
Fue en su perfil de TikTok cuando explicó a sus seguidores que a los 10 días después de la cesárea ya estaba “casi al 100%”. Eso sí, la cicatriz de la cirugía le está pasando factura, pues la madrileña anda preocupada por los problemas que puede ocasionarle la luz del sol para agilizar la curación. Así que la pequeña de las hermanas Pombo no lo ha dudado más y ha decidido someterse a un tratamiento para mejorar su aspecto. Se trata de Indiba, un procedimiento que en palabras de María Pombo “ayuda a la aceleración de la cicatrización y a la recuperación de la elasticidad de los tejidos”. ¿Quieres saber cuál es y en qué consiste? Te lo contamos a continuación.
TRATAMIENTO INDIBA
Indiba es un tratamiento basado en radiofrecuencia con la aplicación de ondas de baja frecuencia para impactar a las capas más profundas de la piel mediante altas temperaturas, con el fin de activar el riego sanguíneo. De esta forma, se consigue activar la regeneración celular de una forma eficiente y nutritiva para acelerar el proceso de curación de la piel.
Esa estimulación natural favorece la producción de fibras de colágeno y elastina (las proteínas encargadas de dar firmeza y elasticidad a la piel) para eliminar la flacidez y revitalizar la dermis. Al mismo tiempo, recupera la flexibilidad de la zona afectada con la movilización, el drenaje y la estimulación del tejido cicatricial, mejorando así el aspecto de la herida y devolviendo el nivel de confort al paciente.
Para tratar cicatrices de cesárea, pueden requerirse ocho sesiones de Indiba
Por todas estas razones, esta técnica está considerada como el tratamiento estrella para las cicatrices fibrosas, pues además, consigue eliminar las molestias en la tripa derivadas de la cirugía. Indiba es totalmente indoloro y se aplica con las piernas del paciente flexionadas y con el deslizamiento de un electrodo por la zona de la cicatriz y alrededores. Al mismo tiempo, el paciente debe realizar una respiración abdominopélvica ‘protectora’ mientras se realiza el tratamiento.
Para conseguir los resultados esperados, se suelen necesitar varias sesiones en función de la zona a tratar, pero es cierto que desde la primera sesión pueden verse los resultados. Indiba es apto para cualquier parte del cuerpo y también puede combinarse con otras técnicas para maximizar los resultados.