El acné es una de las afecciones dermatológicas más comunes en el mundo, que afecta no solo a adolescentes, sino también a adultos de todas las edades. Esta condición, caracterizada por la aparición de granos, puntos negros y lesiones inflamatorias, no es simplemente una preocupación estética; detrás de cada brote hay complejas interacciones entre la microbiotacutánea, las glándulas sebáceas y la respuesta inmunitaria de la piel.
Aunque existen muchos mitos sobre sus causas y tratamiento, el acné es una afección multifactorial que requiere un enfoque médico adecuado para prevenir complicaciones como cicatrices permanentes y molestias emocionales. Comprender sus causas y opciones de tratamiento es fundamental para manejarlo de manera eficaz y cuidar la salud de la piel.
La Dra. Braceras aclara que el acné no es una enfermedad infecciosa, por lo que tocar un grano no hará que otros broten en la piel
En este contexto, la dermatóloga Gadea Braceras Rincón, conocida en redes como @gbr.dermatologa, ha utilizado su perfil de Instagram para abordar uno de los mitos más extendidos sobre el acné: la creencia de que tocarse los granos hace que aparezcan más. Con un enfoque informativo y cercano, la especialista ha explicado las causas reales detrás del acné y por qué es importante evitar manipular las lesiones.
En su publicación, la Dra. Braceras aclara que el acné no es una enfermedad infecciosa, por lo que tocar un grano no hará que otros broten en la piel. Sin embargo, advierte que manipular estas lesiones puede empeorar la inflamación y aumentar el riesgo de cicatrices.
"Evita tocarte los granos porque vas a provocar mayor inflamación y más riesgo de que te queden cicatrices", señala la experta, subrayando la importancia de cuidar la piel con las medidas adecuadas en lugar de caer en prácticas dañinas.
La Dra. Braceras aprovechó la publicación para profundizar en las causas del acné, destacando la alteración de la microbiota cutánea como un factor clave. Según explicó, la piel alberga una gran cantidad de microorganismos que mantienen un equilibrio saludable. Sin embargo, cuando este equilibrio se altera, puede desencadenar una serie de problemas que favorecen la aparición de lesiones inflamatorias características del acné.
"Hay ciertos tratamientos que van destinados a mejorar esa microbiota cutánea"
"Hay ciertos tratamientos que van destinados a mejorar esa microbiota cutánea", comentó la dermatóloga, haciendo referencia a terapias modernas que buscan restaurar este equilibrio. Además, señaló que las alteraciones en la función de las glándulas sebáceas y la respuesta inmunitaria de la piel también juegan un papel fundamental en el desarrollo del acné.
La especialista enfatizó la importancia de acudir a un dermatólogo para recibir un tratamiento adaptado a las necesidades de cada piel. Desde productos tópicos hasta terapias que regulan la microbiota, existen múltiples enfoques para controlar el acné de manera efectiva y minimizar sus efectos secundarios, como las cicatrices.