Reducir los signos de la edad es posible gracias a múltiples tratamientos, pero la eficacia de los masajes faciales son uno de los preferidos por muchas de nosotras. Aprovechar los beneficios de las técnicas de masoterapia, como el drenaje linfático para estimular la circulación de los fluidos corporales, tiene unos efectos casi inmediatos.
La facialista Yvette Pons sabe bien de lo que hablamos y fruto de su dedicación, ha desarrollado una terapia de 60 minutos en los que se realizan 7 técnicas basadas en los E.D.E.D.E.D (Estabilizar, Desintoxicar, Estimular, Despegar, Estirar y Destensar). Estos son los pilares de YV-Lift, un tratamiento que actúa sobre todos los puntos faciales para conseguir la normotonía y evitar la flacidez característica de la madurez.
Vamos a descubrir cómo funciona esta terapia natural sobre las distintas zonas del rostro, de la que se recomienda recibir, al menos, cuatro sesiones anuales:
ESTABILIZAR
Para controlar el eje postural, se aplica la técnica de alineamiento sacro vertebral, actuando sobre el sacro. El correcto alineamiento vertebral está estrechamente relacionado con los cambios músculo-esqueléticos faciales, así que suavizando la rigidez del sacro y mejorando la apertura de la pelvis, se favorecerán los resultados faciales en combinación con la técnica que se practica a continuación.
TÉCNICAS DE APERTURA DIAFRAGMÁTICA
El estado funcional diafragmático está directamente relacionado con los cambios biomecánicos y posturales del cuerpo, y a la vez con el sistema psíquico emocional. Todo ello se refleja en nuestro resultado exterior, así que esta técnica busca favorecer la capacidad de movimiento del diafragma y la amplitud de la caja torácica, con la inhalación y exhalación de aire. La apertura de las escápulas, hombros y tórax repercute en la relajación muscular de toda la zona y en todas las estructuras superiores.
DESINTOXICAR
Este paso ya se aplica directamente sobre el rostro con la técnica de lipo aperturas. Permite abrir y estimular las vías que transportan la prelinfa del espacio intersticial, con toxinas, desechos, macromoléculas de grasas, proteínas, detritos… Con ella, el metabolismo se activa y favorece la regeneración celular.
YV-Lift combina 7 técnicas y 266 movimientos en una misma sesión
Cuando ayudamos a través de los movimientos de drenaje, a los capilares linfáticos a que reabsorban la prelinfa con todas las toxinas, automáticamente el sistema venoso desagua el líquido estancado en los tejidos, mejorando la nutrición de todas las estructuras a través del reequilibrio de la microcirculación. Esta técnica logra la apertura de los puntos linfáticos principales desde el escote hasta el cuello.
TÉCNICA DE LIBERACIÓN DEL CUELLO Y DESPEGUE EPICRANEAL
Esta estimulación realiza movilizaciones para ayudar al despegue epicraneal, músculos occipitales, frontales y temporales, que son los encargados, entre otras funciones, de ayudar a que todos los músculos faciales y del cuello tengan una buena elasticidad, actividad, movilidad y retorno. A través de la técnica de liberación del cuello y despegue epicraneal se activa la oxigenación encefalocraneano y la circulación del líquido cefalorraquídeo o líquido cerebroespinal, mejorando así la capacidad de respiración del cerebro.
DESTENSAR
Se trata de destensar toda la musculatura en general, las inserciones del músculo masetero al hueso cigomático y del músculo frontal a la aponeurosis epicraneal. Dicho destensamiento se consigue con la técnica de vibración destensante. Al finalizar cada deslizamiento en vibración, se masajea el cuero cabelludo y se realizan estiramientos de mechones del cabello para reforzar el despegue epicraneal, que ya se ha trabajado en la técnica anterior.
ESTIMULAR Y DESPEGAR
Mediante la técnica del pianista se activa el riego sanguíneo en profundidad, aumentando la producción de oxígeno, los nutrientes y las proteínas necesarias para devolver la contracción natural y la resistencia a los músculos. Este procedimiento ayuda al desfibrosamiento en cadena de toda la musculatura del escote y del rostro, eliminando el exceso de detritus y proteínas estancadas. Consecuentemente, también fortalece las inserciones entre los músculos y a fijarlas a la estructura ósea a través de los tendones.
ESTABILIZAR, DESTENSAR Y ESTIRAR
Por último, hay que ayudar a la piel y las fascias para que vuelvan a adaptarse a la musculatura y tratar el desgaste óseo y la reabsorción de los huesos. Para ello, se recurre a la técnica de planchado y oseopresión, revirtiendo el envejecimiento facial.