Rinoplastia vs. ácido hialurónico: ¿Qué tratamiento nasal elegir?

La rinoplastia y la rinomodelación con ácido hialurónico son dos opciones muy populares a la hora de lograr una armonía facial que repercuta en la autoestima y la calidad de vida de las personas

La rinoplastia y la rinomodelación con ácido hialurónico, dos opciones muy populares (Foto. Canva)
La rinoplastia y la rinomodelación con ácido hialurónico, dos opciones muy populares (Foto. Canva)
Carmen Bonilla
6 febrero 2025 | 12:00 h

La búsqueda de la armoníafacial a menudo lleva a considerar intervenciones en la nariz, un rasgo central que influye significativamente en la apariencia y la autoestima. Dos de las opciones más populares son la rinoplastia y la rinomodelación con ácido hialurónico. ¿En qué se diferencian estos procedimientos y cuál es el más adecuado para cada persona? La doctora Elena Jiménez, cirujana plástica y estética y directora médica de Eleca Clinic, proporciona las claves para entender estas técnicas.

La doctora Jiménez enfatiza la importancia de un enfoque individualizado en cualquier procedimiento nasal. "La nariz es la parte facial que influye especialmente en la apariencia persona y en la autoestima de cada uno. Cada cirugía nasal se debe estructurar como una cirugía individual y exclusiva para esa persona". Además, define la rinomodelación como "una técnica de cobertura nasal de los defectos con un apoyo estructural en la base nasal".

"La nariz es la parte facial que influye especialmente en la apariencia persona y en la autoestima de cada uno"

RINOPLASTIA VS. RINOMODELACIÓN

Cuando se busca mejorar la apariencia de la nariz, la rinoplastia y la rinomodelación son las dos opciones más comunes. La principal diferencia, según la doctora Jiménez, radica en la naturaleza del procedimiento: "La rinoplastia es una cirugía que modifica de manera permanente la forma y estructura de la nariz, mientras que el ácido hialurónico es un tratamiento no quirúrgico y temporal, que mejora la apariencia de la nariz sin cambiar su estructura interna".

Esta diferencia fundamental implica que la rinoplastia puede abordar problemas tanto estéticos como funcionales, como dificultades respiratorias, al modificar las zonas estructurales nasales. La rinomodelación, por otro lado, se centra en el "camuflaje de los defectos nasales", ofreciendo una solución estética sin alterar la estructura interna.

La doctora Jiménez recomienda la rinoplastia para aquellos que buscan "cambios significativos en la forma de la nariz, como la reducción del tamaño, la corrección de desviaciones del tabique o la modificación de la punta nasal". En cambio, el ácidohialurónico es "una opción para quienes desean corregir imperfecciones menores, como una pequeña joroba o mejorar la simetría sin pasar por una cirugía".

DETALLES DE CADA PROCEDIMIENTO

  • Rinoplastia. Es un procedimiento quirúrgico que se realiza en un quirófano bajo anestesia general. El cirujano modifica la estructura ósea y cartilaginosa de la nariz, abordando también posibles alteraciones funcionales o de respiración. Se trata de una cirugía totalmente personalizada que puede incluir modificaciones óseas y cartilaginosas y el uso de autoinjertos de cartílago, fascia o incluso grasa.
  • Relleno con ácido hialurónico. Es un tratamiento no quirúrgico que se realiza en la consulta sin necesidad de anestesia. Consiste en inyectar ácido hialurónico en zonas específicas para corregir dorsos poco estéticos o elevar la punta nasal. El procedimiento es rápido, durando entre 15 y 30 minutos.

Entre las numerosas diferencias de los procedimientos, destacan:

  • Corrección del problema. La rinoplastia corrige problemas estéticos y funcionales, mientras que el ácido hialurónico solo aborda aspectos estéticos.
  • Duración de los resultados. La rinoplastia ofrece resultados permanentes, mientras que los del ácido hialurónico son temporales, durando entre 9 y 18 meses debido a la reabsorción parcial del ácido.
  • Tipos de problemas que se pueden corregir. La rinoplastia puede corregir problemas estructurales como desviaciones del tabique, obstrucciones nasales o reducir el tamaño de la nariz. El ácido hialurónico solo mejora la estética nasal sin afectar la función respiratoria.
  • Tiempo de recuperación. La rinoplastia implica un proceso de recuperación más largo, de 1 a 2 semanas, con posible hinchazón y hematomas. La recuperación del ácido hialurónico es mucho más rápida, con posible ligera inflamación y enrojecimiento que desaparecen en un par de días.

La rinoplastia no requiere mantenimiento, aunque son importantes las revisiones postoperatorias

La rinoplastia no requiere mantenimiento, aunque son importantes las revisiones postoperatorias. La rinomodelación con ácido hialurónico sí precisa mantenimiento cada 9-12 meses, dependiendo de la reabsorción del ácido y las expectativas estéticas.

La doctora Jiménez recomienda encarecidamente una consulta con un cirujano plástico especializado antes de tomar una decisión. En el caso de la rinomodelación, destaca cuatro conceptos importantes a valorar:

  • La rinomodelación solo mejora alteraciones estéticas menores. Forzar la indicación puede generar resultados poco estéticos.
  • No es una opción para ver un cambio temporal antes de la cirugía; para ello existen simulaciones por ordenador. Además, dificulta al cirujano hacer un proyecto real al distorsionar la anatomía con el volumen del hialurónico.
  • Existen riesgos de problemas vasculares que pueden desencadenar lesiones permanentes.
  • Existe riesgo de infección local debido a la encapsulación del ácido hialurónico.

En conclusión, tanto la rinoplastia como la rinomodelación deben considerarse de forma individualizada, valorando los riesgos y beneficios de cada procedimiento con un especialista médico adecuado.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.