La rinoplastia es una de las cirugías plásticas más demandadas en la actualidad. Ya sea por razones estéticas o funcionales, esta intervención permite modificar la forma y el tamaño de la nariz, corrigiendo problemas de origen congénito, traumático o derivados de enfermedades. Sin embargo, antes de someterse a este procedimiento, es fundamental conocer en qué consiste, qué expectativas tener y cuáles son los cuidados necesarios para una recuperación óptima.
Así, el Dr. Lozano, vicepresidente de Cirugía Estética de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), explica para Estetic.es que “la rinoplastia es una intervención quirúrgica destinada a modificar la forma y el tamaño de la nariz. Sus principales objetivos son mejorar la apariencia estética, restablecer la función respiratoria y reparar deformidades congénitas”.
“La rinoplastia estética se centra en mejorar la apariencia de la nariz, ajustando su forma, tamaño y proyección sin comprometer su estructura”
En este contexto, existen dos tipos principales de rinoplastia: la estética y la funcional. “La rinoplastiaestética se centra en mejorar la apariencia de la nariz, ajustando su forma, tamaño y proyección sin comprometer su estructura”, indica el Dr. Lozano. En cambio, la rinoplastiafuncional “tiene como objetivo solucionar problemas respiratorios derivados de desviaciones del tabique, insuficiencias valvulares o alteraciones en los cornetes”. Entre los problemas que pueden corregirse con una rinoplastia están las deformidades estéticas puras, las derivadas de traumatismos, las malformaciones congénitas y las deformaciones oncológicas tras la extirpación de un tumor.
¿QUIÉNES PUEDEN SOMETERSE A UNA RINOPLASTIA?
Según el Dr. Lozano, “para ser un buen candidato a la rinoplastia, es fundamental contar con buena salud general, tener expectativas realistas sobre los resultados y haber alcanzado el desarrollo facial completo, lo que suele ocurrir alrededor de los 18 años”. Por otro lado, uno de los aspectos clave es la expectativa del paciente. “La rinoplastia mejora el aspecto estético, pero no alcanza la perfección. Cada nariz es única y debe adaptarse a la armonía facial del paciente”, recalca el especialista. Además, añade que “los resultados finales suelen apreciarse entre los 6 y 12 meses posteriores a la cirugía”.
LA CONSULTA INICIAL Y LA PREPARACIÓN PREVIA
En la primera consulta, “se escucha al paciente y se analizan sus expectativas. Posteriormente, se realiza una historia clínica detallada, una exploración física y una valoración de la funciónnasal”. Además, según el caso, se pueden solicitar exámenes complementarios como la tomografíaaxialcomputarizada para evaluar posibles anomalías internas.
Antes de la cirugía, es importante seguir ciertas recomendaciones. “Se debe dejar de fumar al menos un mes antes, evitar medicamentos anticoagulantes o antiinflamatorios y proteger la piel de la exposiciónsolar”, aconseja el Dr. Lozano. Además, se requiere una evaluación por parte del anestesista, ya que la intervención se realiza bajo anestesiageneral.
RIESGOS Y COMPLICACIONES
Aunque la rinoplastia es un procedimiento seguro en manos de profesionales experimentados, existen ciertos riesgos. “Algunas posibles complicaciones incluyen problemasrespiratorios temporales, cambios en la sensibilidad de la piel, cicatrices, asimetría y, en casos excepcionales, pérdida del sentido del olfato”, advierte el experto. En algunos casos, también puede ser necesaria una cirugíaadicional. “Si bien los cirujanos plásticos nos esforzamos por lograr un resultado lo más natural posible, pueden persistir pequeñas imperfecciones que requieran retoques”, comenta el Dr. Lozano.
Tras la intervención,el proceso de recuperación varía según el paciente, pero en general se pueden destacar varias fases. “Durante las primeras semanas, es normal experimentar hinchazón y hematomas, además de llevar una férula para proteger la nariz”. En esta etapa, también pueden presentarse molestias leves y una respiración nasal obstruida debido a la inflamación y los tapones nasales.
“Los cambios iniciales se aprecian en las primeras semanas, pero los resultados finales pueden tardar hasta un año en consolidarse”
Con el paso de los meses, “disminuye la inflamación y mejora la respiración. A medida que pasa el tiempo, la forma de la nariz se define mejor y los resultados se hacen más evidentes”, explica el cirujano. Sin embargo, “los cambios iniciales se aprecian en las primeras semanas, pero los resultados finales pueden tardar hasta un año en consolidarse”. Para garantizar una recuperación óptima, se deben seguir ciertas recomendaciones. “Es crucial evitar golpes, proteger la nariz del sol y asistir a todas las citas de seguimiento. Además, dormir con la cabeza elevada y aplicar frío local en la zona de los ojos y mejillas ayudará a reducir la inflamación”.
La rinoplastia es una intervención que puede mejorar tanto la estética como la función nasal, pero requiere un análisis detallado antes de la operación y un seguimiento riguroso tras la cirugía. Como destaca el Dr. Lozano, “la clave del éxito está en la elección de un cirujano especializado y en tener expectativas realistas sobre el procedimiento”. Con la información adecuada y los cuidados necesarios, los pacientes pueden lograr una nariz armoniosa y funcional.