Sequedad de piel, placas enrojecidas, mucho picor y, en algunos casos, imposibilidad para conciliar el sueño. Así es el día a día de muchas personas con dermatitis atópica, una enfermedad clásicamente asociada a la infancia pero que también puede aparecer en el adulto y generar un deterioro importante de su calidad de vida.
La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica que aparece en forma de erupción cutánea o brotes de eccema. Se da en un 10-15% de la población infantil y en un 1-3% de la población adulta, aunque se piensa que en esta última se encuentra infra diagnosticada ya que es más difícil de detectar en esta etapa pues se confunde con eccemas de otro origen.
En algunos pacientes, los casos más graves, los síntomas no remiten con los tratamientos disponibles y su día a día es muy complejo
Por ello, en función de la extensión de las lesiones y de la inflamación que genere se habla de dermatitis leve, moderada o grave. Para las personas con una forma leve, el tratamiento será a base de corticoides tópicos, inhibidores de la calcineurina (tacrólimus y pimecrolimus) y a veces fototerapia. Si no responden a esta medicación, se opta por ciclosporina oral, y se pasará a otro tipo de inmunosupresores (metrotexato, azatioprina o mofetil micofenolato) si no responden al primero.
Pero además, hay pacientes que no mejoran y para los que ahora se abre un panorama esperanzador con la aparición de terapias biológicas.
Uno de ellos es el dupilumab, un anticuerpo monoclonal que actúa contra el receptor de las interleuquinas 4 y 13 (IL-4/IL-13) implicadas en la inmunidad adaptativa. “Esperamos que en Europa también se autorice en breve”, ha apuntado el doctor Juan Francisco Silvestre, quien ha adelantado que “hay otros fármacos inmunomoduladores que están en fase IIB en estudio para otras enfermedades pero que podrían tener cabida para la dermatitis atópica”.
De la situación de estos pacientes y de las novedades terapéuticas desarrolladas en los últimos meses y que prometen dar un giro en positivo a esta patología, junto con otros problemas dermatológicos como la urticaria, se hablará en la 62 reunión del Grupo Español de Investigación de Dermatitis de Contacto y Alergia Cutánea (GEIDAC) de la Academia Española de Dermatología y Venereología.