En unas semanas subirán las temperaturas y una de las zonas que antes expondremos será el escote. Es el momento de mejorar esa delicada piel que suele envejecer antes por la aparición prematura de arrugas.
El paso del tiempo, la exposición solar sin protección y la sobrecarga de la piel de la zona, que recoge el peso del pecho cuando se duerme de lado, ha hecho que, hasta ahora, fuera inevitable la aparición de arrugas verticales que eclipsan la belleza del escote y lo envejecen de forma prematura.
¿Cómo es la piel del escote? La piel del escote cuenta con particularidades que la distinguen de la piel de otras zonas del cuerpo. Es mucho más fina y delicada, fácilmente quebrantable y de más difícil recuperación, debido a su distribución vascular. Asimismo, su ubicación anatómica hace que sufra directamente los efectos negativos del sol.
La piel del escote cuenta con particularidades que la distinguen de la piel de otras zonas del cuerpo
La doctora Gema Pérez Sevilla ofrece un protocolo novedoso y eficaz que combina tratamientos a todos los niveles para devolver a esta zona todo su esplendor.
-Preparación y restitución cutánea mediante vitaminas, antioxidantes, ácido hialurónico y silicio, que se aplican mediante inyección en la zona.
-Aplicación de láser CO2 reafirmante y estimulante del colágeno mediante el uso de parámetros específicos para el escote, adaptados a las características particulares de esta piel.
-Aplicación de Láser Q Switch para eliminar las manchas.
-Drenaje linfático de la zona asistido con cosméticos reafirmantes formulados específicamente con este fin e instrucción personalizada del paciente para que pueda repetir estos cuidados en su domicilio.
-Uso nocturno de un sujetador antiarrugas sin copas que previene la formación de las mismas y trata las existentes, a la vez que relaja la espalda. Por la posición lateral que se adopta al estar acostada, la mama superior se desplaza hacia la inferior y se producen zonas de pliegues y arrugas, que mantenidas a lo largo de 8 horas de sueño, se hacen totalmente manifiestas. El sujetador se adhiere a la parte delantera del pecho a través de su contorno y sin realizar presión desplaza la tensión de la piel hacia los hombros evitando la perpetuación de las arrugas.