El daño solar representa el mayor riesgo para la salud de la piel en verano. Sin embargo, hay muchas cosas que podemos hacer para cuidar de nuestra piel y tenerla a punto para los días de sol, además del ineludible uso de la fotoprotección. Porque el cuidado de la piel en la época del año que más lo merece no responde únicamente a una cuestión estética, sino también a la propia salud cutánea.
Y, para descubrir todo lo que podemos hacer para cuidar de nuestra piel antes de la exposición solar, nos hemos puesto en contacto con Cristina Galmiche, especialista del cuidado de la piel y directora de los centros de estética Cristina Galmiche, quien ya ha pasado por Estetic en anteriores ocasiones, como en su visita al podcast ‘La Huella de la Piel’.
La experta hace alusión al dicho de que “el rostro es el espejo del alma” y, sea o no cierto, recuerda que “un cutis limpio y cuidado es el requisito indispensable para conseguir una piel sana y bonita”. Por ello, es importante mantener una buena higiene del rostro, que mantenga a raya los granitos y los poros sucios. Así pues, es imprescindible partir de “una buena oxigenación facial”, tratamiento que “debe ser el punto de partida de cualquier tratamiento y ritual cosmético”.
La oxigenación facial busca sanear la superficie cutánea “para reparar el tejido y que nuestra piel pueda mejorarse en condiciones óptimas”. Practicada al 100% de manera artesanal, es ideal para todo tipo de pieles. Además, facilita la recepción de los cosméticos posteriores, ya que “una piel que esté sucia no podrá recibir de la misma manera los activos de las cremas”.
Los rayos UVA y UVB están presentes todo el año, y nuestro rostro es la parte del cuerpo más perjudicada
“Con una piel oxigenada conseguimos despejar la piel de impurezas, oxigenar el tejido y restaurar la piel desde dentro”, indica la experta. Asimismo, este tratamiento aporta “luminosidad natural al rostro, unifica el tono cutáneo y sus resultados se notan desde la primera sesión”, añade.
Lograr una dermis limpia es el primer paso para todo lo demás. A partir de aquí, la experta recuerda que “debemos ser conscientes de las consecuencias que tiene el sol sobre la piel”. Los rayos solares están presentes todo el año y “el rostro es la parte del cuerpo más perjudicada, ya que se expone a la luz en otoño, invierno, primavera y verano”. Sin embargo, cuando llega el verano la exposición solar es más alta, por lo que hay que complementar los cuidados con el uso del protector solar.
La crema solar, de hecho, no sólo protege contra el daño de los rayos del sol gracias al aporte de antioxidantes que neutralizan el efecto negativo de los radicales libres. Además, “sellan los beneficios de los productos anteriores y los conseguidos con la oxigenación”.
CUIDADO FACIAL, DESDE CASA
Además de los protocolos profesionales para asegurar la limpieza adecuada del cutis, es importante servirse de los rituales en casa para potenciar los resultados. Y, para ello, “es esencial incorporar ingredientes y principios activos que proporcionen hidratación, protección y reparación”. Como consejo, la experta recomienda que estos activos ayuden a aclarar el tono de la piel, que protejan contra los rayos UVA, que disminuya la apariencia de los poros, que eliminen las células muertas para estimular la renovación dérmica, que reduzca las arañas vasculares, las rojeces y las ojeras y que ayude a iluminar el rostro.
En su propia línea cosmética, Cristina Galmiche ofrece ‘Dermowhite’, producto para uso facial que proporciona todos estos beneficios. Contiene niacinamida y vitamina C, entre otros activos y, además, está formulada específicamente para tratar las pieles con manchas, ya que sus ingredientes bloquean la síntesis de melanina y proporcionan una piel luminosa, jugosa, hidratada y preparada para actuar contra los daños de la exposición solar.