El mundo de la cosmética está en pleno auge y a las cifras nos remitimos: la industria de la perfumería y cosmética cerró 2022 con un crecimiento del 11,3% en España, según los datos más recientes de la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (STANPA). De media, cada persona se compra 36 cosméticos al año, utiliza de 8 a 10 productos al día e invierte 185 euros anuales aproximadamente en compras en el sector cosmético.
Sin embargo, existe una delgada línea entre el hábito saludable del cuidado de la piel y la obsesión cosmética, algo que ya se está evidenciando entre el público joven y que se ha bautizado como ‘cosmeticorexia’. A eventos como este contribuyen fenómenos como ‘Sephora Kids’, con el que se denomina a las publicaciones en redes sociales (generalmente en vídeo) en las que vemos a niñas y adolescentes utilizando productos de belleza.
Tendencias como el ‘Sephora Kids’ demuestran que la cosmética ha pasado de ser un juego a convertirse en parte de la rutina de cuidados de las jóvenes, que muchas veces incluyen productos que no necesitan y que, consecuentemente, impactan negativamente en su piel. Hablamos de que niñas menores de 12 años son adictas consumidoras de distintos productos para el cuidado facial, maquillaje y belleza. Un peligro que ya ha obligado a tomar distintas medidas en algunos países, como en Suecia, donde se han colocado restricciones de edad a la venta de cosméticos.
Cada español utiliza de media de 8 a 10 productos al día, según la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (STANPA)
La psicóloga Conchita Sisí, directora de la clínica Salud en Mente, ha analizado cuáles son los factores que han propiciado este contexto y qué consecuencias podría generar en el desarrollo de la percepción de las jóvenes adictas a la cosmética. Además, ha dejado unos cuantos consejos para que las familias sepan cómo detectar y cómo abordar el problema:
FACTORES RESPONSABLES DEL FENÓMENO ‘SEPHORA KIDS’
La experta ha destacado dos causas principales en el auge de ‘Sephora Kids’. El primero de ellos, la sobreexposición a las redes sociales en las que crecen las nuevas generaciones, que es “el principal problema”. Esta sobreexposición hace que a las niñas les lleguen estímulos visuales sobre cuáles son los cánones de belleza con los que deben compararse, que no dejan de ser unos “ideales de belleza inalcanzables”.
Por otro lado, la psicóloga señala que la necesidad de perfeccionismo bajo la que vive la sociedad, que es “cada vez mayor” e influye en la autoestima de las personas. Este factor conjuga, además, con “una alarmante y creciente necesidad de consumo relacionada con la búsqueda de esos estándares que, en la mayoría de ocasiones, son inalcanzables, sobre todo teniendo en cuenta su edad”, declara.
La sobreexposición a las redes sociales es "el principal problema" en el auge de fenómenos como el 'Sephora Kids'
Ambas causas conducen a las jóvenes a una distorsión de sí mismas, un efecto que genera un impacto significativo “y no siempre positivo” en la imagen que tienen sobre sí mismas. Esa distorsión les hace también perder la imagen real y la concepción sobre sus propios cuerpos.
¿CÓMO DEBEN ACTUAR LAS FAMILIAS?
La actuación de las familias es clave para evitar que el problema crezca. Por ello, una vez hayan detectado los síntomas, Conchita Sisí aconseja “trabajar la autoaceptación, la autoconfianza y la autoestima desde una edad temprana en el núcleo familiar, pidiendo ayuda y asesoramiento a profesionales”.
Promover cuentas y perfiles que visibilizan el movimiento 'body positive' es positivo para reforzar la autoestima de las y los jóvenes
Muchos padres y madres, ya no sólo para atajar el problema, sino como método preventivo, optan por reducir y frenar la actividad de sus hijos en redes sociales. Sin embargo, la experta recomienda buscar soluciones dirigidas a la reorientación de su uso, como pueden ser la atención cuidadosa y el control parental de forma positiva sobre el uso de las redes sociales.
Asimismo, aconseja supervisar cuáles son los referentes de sus hijos, apostando por la visibilización de las cuentas o de los perfiles que promueven el movimiento ‘body positive’ y que muestran rutinas cosméticas o del cuidado de la piel adecuadas a su edad.