Uno de los deseos de todas aquellas personas que seguimos una skincare a diario es conseguir una tez perfecta y envidiable,libre de imperfecciones, granitos, puntos negros y otros problemas de la piel, como son las manchas o la rosácea. Y lo hacemos no tanto por motivos estéticos, sino también por cuestión de salud de la piel. Cada piel es un mundo, pero hay rutinas de cuidados específicas para conseguirlo.
Los brillos en el rostro han estado mal vistos tradicionalmente, ya que podría parecer un exceso de sebo natural y grasa en la piel, así que los acabados mate se han preferido durante años. Sin embargo, una nueva tendencia aterrizada desde Corea podría cambiar esta percepción. Hablamos del glass skin o piel de cristal, una corriente de cuidados coreana para conseguir una piel brillante y natural, libre de manchas. Algunos profesionales la describen como de aspecto vidrioso o traslúcido y se ha popularizado en Occidente gracias al auge de los grupos de música de K-Pop.
¿QUÉ ES LA ‘GLASS SKIN’? ASÍ ES EL PASO A PASO
La piel de cristal o glass skin es una rutina de cuidados facial que persigue un rostro natural y luminoso, con efecto rocío o con la ilusión óptica de haber sido pulverizado con agua. La piel de cristal da apariencia de frescura y naturalidad al rostro, con un acabado cristalino que no deja manchas ni ningún tipo de imperfecciones, y aunque se puede conseguir a través del maquillaje, en este caso nos referimos a una piel perfecta trabajada con una rutina de cuidados paso a paso.
El objetivo es tener una piel sana, lisa y homogénea para no tener que usar maquillaje. Para lograrlo, puedes seguir los pasos que propone la rutina de glass skin:
- Limpiar: en primer lugar, hay que limpiar bien la piel para eliminar los restos de maquillaje y/o suciedad del rostro. Realiza este paso antes de irte a dormir, primero con un desmaquillante y luego con un gel limpiador, aunque puedes llevar a cabo una doble limpieza facial para profundizar en los poros y mejorar los resultados. Además, sobre una piel limpia penetrarán mejor los cosméticos posteriores.
- Exfoliar: este paso únicamente debes incorporarlo unas dos veces por semana. Con la exfoliación conseguirás retirar las células muertas de la piel y favorecer así la regeneración de los tejidos, pero al ser un procedimiento más agresivo, por eso sólo debes aplicarlo dos veces a la semana. Puedes utilizar un exfoliante mecánico (con gránulos) si tienes la piel sensible o con tendencia a la irritación, o uno enzimático para mejorar la acción limpiadora a través de los principios activos.
Los exfoliantes mecánicos están indicados para pieles sensibles, mientras que los enzimáticos para pieles más resistentes
- Tónico para la piel: una vez hayas limpiado bien tu cutis y esté a punto, llega el momento de hidratar, nutrir y reequilibrar en profundidad con un tónico. Este producto se formula con agua, oxígeno, hidrógeno, vitaminas, ácidos, antioxidantes e ingredientes antiinflamatorios para nutrir la piel en profundidad, trabajando todas las capas del tejido cutáneo. Además de tonificar, este cosmético reequilibra el pH de la piel, desobstruye los poros y disminuye su tamaño, así como reduce el enrojecimiento de la piel.
- Hidratación + nutrición: aunque el tónico nutre e hidrata la piel, su principal función es la de terminar de limpiar y equilibrar los niveles de la piel con su fórmula. Por eso, es muy importante utilizar a continuación un producto específico para nutrirla, con una crema hidratante, sérum o mascarilla que incorpore ingredientes que alimenten los tejidos y que favorezcan la regeneración de la piel mediante la producción natural de colágeno y elastina.
- Aceite facial: llega el paso diferencial de la rutina. Para conseguir ese efecto luminoso y acuoso, la glass skin propone utilizar un aceite facial que dé brillo a la piel, adaptado a sus necesidades. En los casos de pieles secas o deshidratadas, la aplicación de un aceite facial será ideal para aportarle esa hidratación extra, así como para iluminar el rostro, aunque si tú tienes una piel mixta o sensible, deberás buscar una fórmula no comedogénica para no propiciar la aparición de granitos.