Las fórmulas ricas en proteínas y lípidos penetran en las capas más profundas de la piel ayudando a minimizar los marcadores propios de la edad
En este contexto, Miriam Quevedo presenta un ritual que combina un tratamiento de rejuvenecimiento facial con un protocolo para esculpir el cuerpo. Se trata de Royal Glaciar White Caviar y está inspirado en la técnica de masaje escultora mediante técnicas vanguardistas de lipomassage y maniobras bioestimulantes antiedad.
Sus fórmulas ricas en proteínas y lípidos penetran en las capas más profundas de la piel ayudando a minimizar los marcadores propios de la edad. Además, si cóctel de ingredientes activos aporta una protección extra frente a los agentes externos que perjudican a nuestra epidermis, como pueden ser la polución la radiación solar y otros factores internos.
Como resultado se obtiene una reacomodación del volumen interno y se estimulan los músculos faciales dejando un efecto lifting que esculpe el contorno facial atenuando las arrugas y las líneas de expresión. Por otra parte, también se aprecia una reducción de las ojeras, la estimulación de colágeno y elastina, así como un drenaje de las toxinas, lo que se traduce en una mayor luminosidad en la epidermis gracias al aporte de oxígeno y nutrientes a las células.
PROTOCOLO
Finalmente, la fase Rejuvenating Facial Ritual incluye limpieza, exfoliación, oxigenación, reparación, dinamización cutánea, restauración tensora y protección. Todo ello combinado con maniobras inspiradas en la técnica de drenaje linfático manual a nivel corporal, incluyendo la zona del cuello y las cervicales.
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