Hace un tiempo ya que las cejas se convirtieron en unas de las grandes protagonistas del rostro de las mujeres. Tendencias que van desde las cejas finas y delgadas, a las gruesas y pobladas, las despeinadas al estilo ‘Lion Mane’ o incluso las perfectamente y milimétricamente conseguidas. Para conseguirlo, han surgido en los últimos años diferentes formas de conseguirlo. Desde los cepillos o los sérums de crecimiento para las que quieren cejas más pobladas, hasta los tratamientos como el microblading, el tinte de cejas o el laminado.
Precisamente este último es el elegido por muchas mujeres y también influencer y famosas. ¿Sabes qué lo hace ser el tratamiento ideal?
El laminado de cejas es un tratamiento que alinea los vellos hacia la dirección que prefieras, aportando definición y fijación, llegando a conseguir una sensación de planchado y definición todo el tiempo. Gracias a este tratamiento, se consigue que las cejas luzcan más gruesas, llegando incluso a tapar los pequeños huecos blancos que pudieran ser visibles.
Se trata de un tratamiento ideal para las mujeres con cejas rebeldes. En primer lugar, se debe preparar la zona mediante una limpieza con tónico o agua micelar y a continuación se procede al cepillado de las cejas, hasta conseguir la forma que se desea conseguir. Si ya sabemos la forma que queremos para nuestras cejas, el siguiente paso es realizar el alisado químicamente mediante el uso de queratina. Y por último, se aplica un producto hidratante y nutritivo para asegurarnos de que el resultado queda fijado hasta la próxima sesión.
Las sesiones tienen una duración de entre 40 y una hora, aunque dependiendo de lo que quiera conseguir cada persona y el tipo de ceja que se esté trabajando. Además, se trata de una técnica indolora, ya que requiere de una pigmentación semipermanente, sino de la aplicación de un producto que selle el resultado.
DIFERENCIA CON EL MICROBLADING
A diferencia del laminado de cejas, el microblading es una técnica de pigmentación superficial que consiste en imitar el crecimiento del pelo de las cejas e ir dibujándolo uno a uno. Hay quienes lo considerar como una especie de tatuaje temporal que necesita ser repasado en diferentes sesiones ya que se desgasta con el tiempo. Además, en este caso si se puede apreciar una pequeña molestia durante su realización, del mismo estilo que las agujas de los tatuajes.
En cuanto a su duración, el microblading tiene una duración aproximada de entre nueve y 12 meses. Mientras que el laminado de cejas tiene una duración de entre cuatro y ocho semanas, aunque dependiendo del grosor y la calidad del pelo.