La labioplastia es una cirugía a la que cada vez recurren más mujeres. Pero, ¿en qué consiste?
Según la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, el objetivo de la labioplastia es disminuir el tamaño de los labios menores para que queden en consonancia con los labios mayores. Para llevar a cabo el procedimiento se utilizan varias técnicas quirúrgicas según la situación concreta de la paciente.
Por un lado está el procedimiento de recorte, la técnica original y más natural de realizar, y también la más utilizada por los cirujanos. En este procedimiento, el exceso de labios menores se retira y sutura para que sea simétrico con los labios mayores.
El objetivo de la labioplastia es disminuir el tamaño de los labios menores para que queden en consonancia con los labios mayores
Por otro lado está el procedimiento donde se retira una porción parcial de la parte más gruesa de los labios menores. La submucosa (tejido de capa debajo de una membrana mucosa) debe dejarse intacta eliminando solo un espesor parcial. Este procedimiento también le da a la vagina un aspecto natural después de la cirugía, preservando los bordes arrugados.
Después de la operación, debes evitar las duchas largas y secar la herida cada vez que lavas. Los antibióticos recetados por el cirujano deben tomarse para reducir el dolor y la inflamación, que pueden estar presentes después del procedimiento.
Deberás evitar montar en bicicleta, correr y otras actividades físicas hasta que tu cirujano plástico te dé el alta. El retorno prematuro a las actividades puede ejercer presión sobre la herida y retrasará innecesariamente el proceso de curación.
Tampoco debes usar ropa ajustada o ropa interior ya que causan fricción contra la herida.