Hoy en día, son muchas las personas que recurren a tratamientos estéticos para frenar el paso del tiempo. Y es que, a nadie le gusta ver como su rostro empieza a experimentar los primeros signos de envejecimiento.
Para ayudar en esto, los centros The Beauty Concept disponen del masaje facial de origen japonés kobido, una técnica utilizada en Japón desde hace siglos, que ayuda a rejuvenecer y reparar el tejido facial, y previene y reduce el impacto del proceso del envejecimiento, liberando la energía y la tensión bloqueada en los músculos faciales y del cuello.
Y es que, con maniobras muy rápidas y rítmicas se estimula el sistema nervioso, se mejora la circulación de la sangre y el flujo linfático, se consolidan y tonifican los músculos, y se equilibra el flujo de la energía en el rostro hasta recolocar el óvalo facial.
Los centros The Beauty Concept disponen del masaje facial de origen japonés kobido, una técnica utilizada en Japón desde hace siglos
Además, estas técnicas terapéuticas estimulan los nervios faciales alcanzando las células de la piel para incrementar la circulación sanguínea, distribuyendo nutrientes y eliminando las toxinas, impurezas y células muertas de la piel.
El protocolo es muy sencillo. Primero se comienza con una limpieza profunda de la piel que se inicia con una exfoliación para oxigenarla y dejarla perfectamente preparada para las maniobras que se realizan a continuación, personalizando esta fase de limpieza en función de la piel, edad, identidad hormonal, etc.
Después se aplican unos sueros personalizados con ingredientes activos puros (oligoproteinas, minerales, placenta, algas marinas, ácido hialurónico, colágeno), un alimento que la piel necesita en función de la estación o de su patología.
A continuación, con aceite de aguacate o de avellanas se ejecutan las maniobras de kobido para reparar el tejido y reducir el proceso de envejecimiento. Este paso dura aproximadamente 40 minutos.
Una vez que se finaliza la realización del masaje kobido, se elimina el exceso de producto excedente si ello fuera necesario, y se aplica un fluido que ha sido previamente personalizado en función de las necesidades de la piel.