Uno de los sueños de casi todas las mujeres es tener una melena sana y bonita. Para ello existen unos consejos básicos que todos conocemos y que están ligados a nuestro estilo de vida y costumbres, como por ejemplo seguir una alimentación equilibrada, no abusar de herramientas de calor ni de procesos químicos, como decoloraciones y tintes... Pero sin duda existe un gesto sencillo y al alcance de todo el mundo para tener una melena que enamore, y en el que tal vez no has reparado: el cepillado.
Y es que, si quieres tener un pelo sano y bonito, desde Toni&Guy señalan que lo mejor es dedicar unos minutos a cepillarlo, un par de veces al día. No hace falta que te sientes frente al tocador, cepillo en mano, y repitas el gesto 100 veces, como hemos visto mil veces en las películas de los años 50. Con solo 10 o 20 pasadas -dependiendo del grosor del pelo- será más que suficiente.
Es un gesto imprescindible para la limpieza del cabello porque lo deja libre de impurezas y resto de productos
Pero, ¿cuáles son los beneficios de un buen cepillado? Para empezar, es un gesto imprescindible para la limpieza del cabello porque lo deja libre de impurezas y resto de productos. También activa la circulación del cuero cabelludo y con ello llegan más nutrientes al bulbo, lo que redunda en un mejor anclaje de la fibra capilar y, por lo tanto, reduce la caída del cabello.
En cuanto a las veces que hay que cepillarse al día, la respuesta correcta sería: tantas veces como sean necesarias para mantener el cabello desenredado. Lo ideal es hacerlo dos veces al día (por la mañana y antes de acostarse), pero también deberías cepillarlo al quitarte el casco de la moto o la bici, el gorro, etc.
Por otra parte, otra de las máximas para tener un pelo sano y bonito es cepillarlo siempre antes de lavarlo. Cuando lo tenemos seco, el cabello está en su estado más fuerte y resistente. Después, al lavarlo, intenta no revolverlo todo. Solo deberías lavar el cuero cabelludo y con el jabón que se resbale por tu cabello ya habría suficiente para que se limpie el tallo capilar.
En lo que se refiere a cómo deberíamos cepillarnos, una regla básica y muy importante es empezar siempre por las puntas, sin tirones bruscos y sujetando el mechón desde muy cerca de donde quieras empezar a cepillar. Después de medios a puntas y terminar cepillándolo de raíz a las puntas. Además, hay que empezar a cepillar el cabello desde dentro, es decir, desde la nuca.
También es importante escoger el cepillo idóneo, ya que esto ayuda, entre otras cosas, a evitar la rotura del pelo y sacarle mayor partido, pero todo dependerá de tu tipo de cabello y del momento en el que lo cepilles.