Con el paso del tiempo puede irse formando debajo del rostro lo que se conoce como doble mentón o papada, un problema estético bastante común y que preocupa cada vez a más personas y a edades más tempranas.
Los cambios de peso, la adicción al móvil, los problemas hormonales y el paso del tiempo, entre otras causas, hacen que este problema estético se acentúe cada vez más.
Hay diversos factores que influyen en su producción: genéticos, hormonales, cambios de peso... y hoy día, hay que añadir el ''cuello smartphone''.
El cuello se dobla por completo hacia abajo cada vez que vemos el móvil o la tablet y con este gesto, se ejerce una presión sobre la columna que afecta al cuello, el cual, al no poder aguantar el peso, cede repetidamente y se va rellenando de un acúmulo de grasa y toxinas. Todo ello, da lugar a un exceso de volumen que incluso aparece no solo en personas con unos kilos de más, sino en aquellas más delgadas. Incluso diríamos que en las más delgadas es más perceptible al contrastar con el resto de la cara.
Con el paso del tiempo puede irse formando debajo del rostro lo que se conoce como doble mentón o papada
Ese abultamiento de tejido subcutáneo que cuelga bajo la barbilla, es decir, la papada, se ha convertido en uno de los mayores complejos del siglo XXI y es un gran reto para los profesionales de la estética. Además, a partir de los 35 años, acumulamos más grasa en esta zona, ya no solo por unos kilos de más, sino también por la flacidez o un corto desarrollo de la mandíbula en muchas ocasiones.
Pero hay que decir que no todas las papadas tiene el mismo origen, ni se tratan por igual, por eso es de suma importancia realizar un buen diagnóstico previo al tratamiento. Sin él, el hecho de tratar a todas los pacientes por igual dará como resultado un fracaso terapéutico.
En la Clínica del doctor Moisés Amselem y en Urbam Clinic han desarrollado un protocolo de tratamiento, con un año de duración, consistente en la combinación de dos procedimientos: reducción de grasa mediante la inyección de péptidos biomiméticos Prostrolane Inner B y sujeción con hilos de cánula con espiculación 360.
¿Cómo actúan? Con Prostolane Inner B se consigue reducir y frenar la nueva producción de grasa y con los hilos se aborda el descolgamiento propio, consiguiendo un efecto lifting gracias a la tracción y efecto tensado.
La inyección de Prostrolane Innner B consta de 4 péptidos (conjunto de aminoácidos) biomiméticos (se asemejan a los que ejercen nuestras funciones metabólicas fisiológicas), dos con capacidad reductora de grasa (acción lipolítica) y otros dos que frenan la producción de nueva grasa.