Aunque podamos tener la concepción de que el frío es una sensación desagradable que nos desequilibra, en realidad presenta más beneficios de los que nos planteamos, tanto para el cuerpo como para la mente. Y es que se ha demostrado que sus propiedades pueden recuperar los tejidos del cuerpo, favoreciendo su depuración y contribuyendo a su desinflamación.
CRIOTERAPIA: FRÍO PARA TRATAR EL CUERPO
En tratamientos estéticos, el avance tecnológico nos ha dejado un procedimiento revelador basado en la crioterapia para obtener fines terapéuticos. Hablamos de Crioterapia de Cuerpo Entero, consistente en la exposición corporal rápida e intensa a temperaturas de aire muy bajas para mejorar el rendimiento, la cicatrización, el sueño, combatir el estrés, rejuvenecer los tejidos, reducir el dolor, la inflamación y tensión muscular y favorecer la cicatrización.
Lo realmente novedoso de este tratamiento es la eficacia y velocidad de los resultados, pues sólo dos horas después de recibir una sesión, ya pueden notarse. Desde Longevity Hub by Clinique La Prairie Madrid, donde ofrecen esta terapia, nos explican que el choque térmico, que alcanza temperaturas de hasta -110ºC, se estimulan los mecanismos termorreguladores con fines analgésicos, antiinflamatorios, antioxidantes y vaso-tónicos.
El frío tiene un efecto vasoconstrictor, es decir, que estrecha los vasos sanguíneos
Como probablemente hayas escuchado alguna vez, el frío viene muy bien para la circulación y sus efectos hemodinámicos reducen la obstrucción de los vasos sanguíneos, redistribuyen la sangre hacia los órganos con mayor fluidez, mejoran la oxigenación y eliminan las toxinas.
PROPIEDADES DE LA CRIOTERAPIA
Estas son las ventajas que este tratamiento tan completo aporta al conjunto del cuerpo:
- Debido al efecto vasoconstrictor de la crioterapia y al tratamiento muscular, está altamente recomendada para recuperar el tono muscular y cicatrizar los tejidos cuando ha habido lesiones o cuando deseamos preparar el cuerpo para algún entrenamiento. De esta manera, permitirá mejorar el rendimiento deportivo y dar una mayor sensación de ligereza.
- Sus propiedades analgésicas funcionan como lo haría la atención sanitaria para combatir el dolor. La crioterapia incorpora las cualidades antiinflamatorias y vasoconstrictoras del frío para aliviar de forma inmediata el dolor y la inflamación. En el ámbito sanitario se utiliza para tratar los dolores de cabeza y de espalda y afecciones cutáneas como la dermatitis, la psoriasis, también enfermedades inflamatorias como la artritis, el reuma o la fibromialgia.
- Por todos estos beneficios señalados, la crioterapia es fuente de bienestar. Está indicada como técnica para reactivar y regenerar el sistema linfático, favoreciendo el drenaje de las toxinas acumuladas y aportando la sensación de relajación. Esa mejoría física tiene su impacto en la mente del paciente, reparando el estrés, la ansiedad y optimizando el estado de ánimo. Además, es muy útil para tratar el insomnio y recuperar un buen horario de descanso.