Adelgazar, tonificar de forma profunda, proteger y reafirmar la piel, regenerar y mejorar la textura de la piel del rostro, estimular la microcirulación o la pérdida de peso dirigida. Son algunos de los objetivos principales que tienen todas las mujeres. ¿El objetivo? Eliminar todas las imperfecciones y conseguir tener el cuerpo que siempre habían deseado.
Desde la clínica de Carmen Navarro cuentan con un tratamiento capaz de lograr todos lo nombrado anteriormente y gracias al uso del frio. Toma nota de todo lo que debes saber sobre el cryoback.
¿Cómo funciona? Gracias al programa Cryo Contrast, que alterna entre temperaturas altas y bajas (de 40°C a -5°C), recrea los beneficios de un baño de contraste, eliminando más eficazmente las toxinas y acelerando el flujo de sangre rica en oxígeno hacia los tejidos. La electroterapia se encargar de que la sensación de frío sea mucho más confortable y, al mismo tiempo, potencia el consumo de calorías.
Cryoback ayuda a eliminar las imperfecciones y conseguir el cuerpo deseado
¿Cuál es su secreto? Gracias a tres nuevas corrientes: Press, Push In y Push Back se consigue un doble efecto adelgazante. La activación muscular provoca contracciones que desafían a los músculos al máximo y responden a estas contracciones extremas adaptándose y tonificándose. Un ejemplo: un tratamiento de una hora centrado en los músculos abdominales equivale a realizar más de 7.000 abdominales o sentadillas, lo que permite una tonificación intensiva con total comodidad.
¿Cómo quema calorías? Vincular el tratamiento con frío y la electroterapia amplifica la tendencia natural del cuerpo a quemar calorías en condiciones de temperatura cambiantes. Afortunadamente, el cuerpo regula la temperatura de forma natural. Cuando el cuerpo se expone localmente a un frío intenso, la termorregulación estimula los músculos que conducen a los escalofríos para producir calor. Los escalofríos son una sucesión de contracciones musculares involuntarias que multiplican hasta por cinco el consumo de calorías para elevar la temperatura corporal. El aprovechamiento de los músculos de esta manera conduce a un superconsumo de energía, que se extrae directamente de la grasa local que se puede movilizar fácilmente.