La dermatitis es una de las afecciones cutáneas más común entre la población. Sin embargo, no siempre es fácil identificar el tipo que se padece. Dependiendo de los factores, las causas y los síntomas se padecerá una dermatitis u otra, por lo que el tratamiento no será el mismo.
Desde Estetic.es te ayudamos a identificarlas:
DERMATITIS ATÓPICA
Se trata de una afección crónica de la piel. Por lo general, la dermatitis atópica se presenta durante la infancia con mucha sequedad y comezón en la piel. Las zonas más afectadas son las articulaciones, los glúteos y las mejillas. La piel además tiende a descamarse e incluso, puede brotar de ella un líquido transparente.
Las personas que tienen este tipo de dermatitis también suelen padecer asma o alergias estacionales. En cuanto el picor, este suele presentarse de una forma muy intensa, pero se debe evitar el rascado, ya que favorece la aparición de heridas y costras.
DERMATITIS POR CONTACTO
Es más propensa en los adultos. Este tipo de dermatitis aparece debido a una reacción que padece la piel al haber estado en contacto con alguna sustancia irritativa. Los síntomas principales se manifiestan como ardor intenso, picor y enrojecimiento. En este caso, las zonas más afectadas son las extremidades y las ingles.
DERMATITIS SEBORREICA
En este caso, las zonas afectadas son las más grasas. Por este motivo, la dermatitis seborreica suele darse en el cuero cabelludo, en la cara o dentro del oído. Las escamas que aparecen tienen un aspecto entre blanco y amarillento y producen irritación, enrojecimiento, e inflamación en la piel.
Las causas de este tipo de dermatitis crónica se desconocen, aunque en numerosas ocasiones, la comunidad médica ha concluido diciendo que se debe a factores hereditarios. Por supuesto, el estrés, los climas extremos, la obesidad o las afecciones neurológicas también son factores de riesgo para su aparición.
En cuanto al tratamiento, este pasa por el uso de productos cosméticos y de higiene que contengan ácido salicílico, alquitrán de hulla, zinc, resorcina, ketoconazol o sulfuro de selenio.
DERMATITIS POR ESTASIS
Es un cambio de la piel que ocurre cuando la sangre se acumula en las venas de la parte inferior de la pierna. La culpable de su aparición, por tanto, es la mala circulación. De esta forma se pueden presentar dolores, pesadez, hinchazón, endurecimiento de la piel, abolladuras y un color castaño oscuro.
Para este tipo de dermatitis, además de las cremas de uso tópico, también serán necesarios los antibióticos orales, los apósitos húmedos y las medias de compresión.
DERMATITIS NUMULAR
Las manchas de la dermatitis numular tienen la forma de una moneda y aparecen en la parte posterior de las extremidades, en el tronco y en los glúteos. Los cambios bruscos de temperatura favorecen su aparición. De hecho, el invierno es la época más propensa sobre todo en aquellos que tienen una piel más seca. Eso sí, el tratamiento se centra básicamente en el alivio de los síntomas.
Porque tú eres lo más importante… Estetic.es
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DERMATITIS ATÓPICA
Se trata de una afección crónica de la piel. Por lo general, la dermatitis atópica se presenta durante la infancia con mucha sequedad y comezón en la piel. Las zonas más afectadas son las articulaciones, los glúteos y las mejillas. La piel además tiende a descamarse e incluso, puede brotar de ella un líquido transparente.
Las personas que tienen este tipo de dermatitis también suelen padecer asma o alergias estacionales. En cuanto el picor, este suele presentarse de una forma muy intensa, pero se debe evitar el rascado, ya que favorece la aparición de heridas y costras.
DERMATITIS POR CONTACTO
Es más propensa en los adultos. Este tipo de dermatitis aparece debido a una reacción que padece la piel al haber estado en contacto con alguna sustancia irritativa. Los síntomas principales se manifiestan como ardor intenso, picor y enrojecimiento. En este caso, las zonas más afectadas son las extremidades y las ingles.
DERMATITIS SEBORREICA
En este caso, las zonas afectadas son las más grasas. Por este motivo, la dermatitis seborreica suele darse en el cuero cabelludo, en la cara o dentro del oído. Las escamas que aparecen tienen un aspecto entre blanco y amarillento y producen irritación, enrojecimiento, e inflamación en la piel.
Las causas de este tipo de dermatitis crónica se desconocen, aunque en numerosas ocasiones, la comunidad médica ha concluido diciendo que se debe a factores hereditarios. Por supuesto, el estrés, los climas extremos, la obesidad o las afecciones neurológicas también son factores de riesgo para su aparición.
En cuanto al tratamiento, este pasa por el uso de productos cosméticos y de higiene que contengan ácido salicílico, alquitrán de hulla, zinc, resorcina, ketoconazol o sulfuro de selenio.
DERMATITIS POR ESTASIS
Es un cambio de la piel que ocurre cuando la sangre se acumula en las venas de la parte inferior de la pierna. La culpable de su aparición, por tanto, es la mala circulación. De esta forma se pueden presentar dolores, pesadez, hinchazón, endurecimiento de la piel, abolladuras y un color castaño oscuro.
Para este tipo de dermatitis, además de las cremas de uso tópico, también serán necesarios los antibióticos orales, los apósitos húmedos y las medias de compresión.
DERMATITIS NUMULAR
Las manchas de la dermatitis numular tienen la forma de una moneda y aparecen en la parte posterior de las extremidades, en el tronco y en los glúteos. Los cambios bruscos de temperatura favorecen su aparición. De hecho, el invierno es la época más propensa sobre todo en aquellos que tienen una piel más seca. Eso sí, el tratamiento se centra básicamente en el alivio de los síntomas.
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