Tanto para ganar volumen, como para reducirlo, en ocasiones no es suficiente con la dieta y el deporte para conseguirlo. Siempre llega un momento de bloqueo en el que ya no se puede hacer mucho más por modificar los volúmenes naturales del cuerpo y necesitaremos ayuda externa para lograr las formas deseadas. Por ejemplo, si el cuerpo tiene acúmulos de grasa localizada que responden a factores hereditarios u hormonales o bien si nuestro pecho es pequeño o carece de proyección.
Por ello, para todos estos casos, la unidad de cirugía estética de Institut Vila-Rovira, dirigida por el doctor Ramón Vila-Rovira, analiza el caso particular y sus expectativas, para poder proponer soluciones que aporten al conjunto del cuerpo una armonía que consiga potenciar su belleza y atractivo naturales.
Así pues, siempre se perseguirá dentro de las posibilidades, asimilar la silueta de la paciente a la de un 'reloj de arena', marcando su cintura para que destaquen por contraste la cadera y los pechos. Esta proporción tiene una traducción numérica y se tratará de conseguir que, de la división de los centímetros de circunferencia de la cintura entre los centímetros de circunferencia de la cadera, se obtenga un resultado lo más cercano 0,7.
Tanto para ganar volumen, como para reducirlo, en ocasiones no es suficiente con la dieta y el deporte para conseguirlo
El procedimiento más completo en cuanto a redistribución de la grasa de la paciente es la liposucción con posterior lipofilling, porque permite aspirar la grasa de una zona determinada e inyectarla en otra. Por ejemplo, reducir los flancos y abdomen para acentuar la cintura de la paciente, e inyectar esa grasa en caderas y glúteos.
Asimismo, la grasa retirada mediante cánulas por aspiración durante la liposucción se procesa y, mediante inyecciones, se deposita en aquellas zonas en las que se quiera incrementar el volumen como, por ejemplo: caderas, glúteos o pechos.
No obstante, conviene informar a la paciente de que el resultado del lipofilling depende de la fijación de la grasa, que acostumbra ser del 70%. Si la paciente y el cirujano lo consideran oportuno, se puede realizar un segundo tratamiento lipofillins hasta lograr una fijación del 100% de la grasa.
Si la paciente, además de exceso de grasa en la zona del torso, presenta flacidez abdominal, se puede combinar la liposucción con una abdominoplastia, que apueste por reconstruir piel, grasa y músculos de la pared abdominal para volver a redefinir abdomen y cintura.
De igual forma, el aumento de pecho también contribuye a aproximar la silueta de la paciente a la deseada forma del reloj de arena. La mamoplastia de aumento es una técnica quirúrgica que consiste en la implantación de una prótesis bajo la glándula mamaria o la fascia del músculo pectoral. Generalmente se implanta por debajo del músculo para que la prótesis tenga más cobertura por los tejidos propios del cuerpo.