Si eres de esas personas que, bien por el paso de los años, por algún proceso de estrés continuado o por la práctica de deporte en exceso, has sufrido una pérdida importante de volumen y masa muscular, estás de suerte.
Y es que, según Paz Torralba, directora de los centros de belleza The Beauty Concept, existe un tratamiento que combina hidroxiapatita cálcica y ácido hialurónico de diferente reticulación que consigue un resultado natural mediante un proceso de infiltración.
Por un lado, la hidroxiapatita cálcica es uno de los rellenos más seguros y es totalmente biocompatible, ya que se encuentra habitualmente en nuestro organismo. Se inyectan con una cánula en la piel para evitar los hematomas, sin sentir ningún tipo de molestia. ''Por lo general, con una única sesión donde se inyecte es suficiente para tratar la zona deseada, aunque en ocasiones puede ser necesario repasarlo para lograr los resultados deseados'', apunta Torralba.
Existe un tratamiento que combina hidroxiapatita cálcica y ácido hialurónico de diferente reticulación
Al no tener componentes de origen animal, es uno de los rellenos más seguros y adecuados para tratar la flacidez facial, sin apenas riesgos ni efectos secundarios. Además, debido a su grado de viscosidad, es un compuesto que no migra y que mantiene la expresión natural del rostro. Los resultados de este tratamiento son inmediatos y dura hasta 2 años.
Por otro lado, los rellenos con ácido hialurónico consisten en infiltrar una sustancia natural y con propiedades reabsorbibles en el rostro, con el fin de recuperar los volúmenes perdidos por el paso del tiempo. Entre sus funciones también están el devolver la luminosidad, firmeza, tonicidad e hidratación al rostro. Reduce, fortalece y rejuvenece la piel, estimula la síntesis de colágeno y tiene una acción antioxidante.
Dependiendo de la densidad y reticulación tiene una función u otra. En alta densidad corrige arrugas profundas, redefine el óvalo, rellena volúmenes y recupera masa muscular. Si no está reticulado, lo que genera es una hidratación en profundidad, devuelve el tono de la piel, e ilumina y aporta la jugosidad que vamos perdiendo con los años. Lo ideal de este tratamiento es la combinación para no solo rellenar.
Se realiza con cánula o micro aguja, dependiendo de la zona a tratar y lo que se quiera conseguir. Los resultados son de inmediato, aunque mejoran pasadas 3-4 semanas, donde ya se ha generado colágeno, permaneciendo entre 9 (hidratación) y 12-18 meses (alta reticulación).