Se dice que el embarazo es una de las etapas más bonitas por las que pasa una mujer, pero también una de las más duras. Y es que, el cuerpo experimenta ciertos cambios que pueden hacer que no nos veamos cómo nos gustaría.
Por ello, la doctora Paula Rosso, especialista en nutrición y estética corporal del Centro Médico Lajo Plaza, nos revela los mejores tratamientos para cuidarse durante el embarazo. ¡Apunta!
En lo que se refiere al primer trimestre del embarazo, el cuerpo todavía no experimenta grandes cambios, salvo el aumento de pecho y la pérdida de la cintura. Sin embargo, se ceba especialmente con la piel del rostro. Lo más normal es estar literalmente demacrada, tanto por el malestar digestivo que es más frecuente en el primer trimestre, como por razones hormonales que vuelven la piel pálida y ojerosa.
Por esta razón, la especialista recomienda la oxigenación facial, que viene muy bien para revitalizar la piel y eliminar el toque de cansancio; peelings físicos, ya que es aconsejable realizar una exfoliación regular de la piel del rostro y el cuerpo; y cosmética antiestrías, para preparar la piel para la distensión a la que se va a ver sometida.
En cuanto al segundo trimestre del embarazo, se dice que es el mejor momento para la piel. Hay más estrógenos y la hormona del embarazo vuelve la piel más jugosa y luminosa. En cambio, el cuerpo ya es otra cosa.
En lo que se refiere al primer trimestre del embarazo, el cuerpo todavía no experimenta grandes cambios, salvo el aumento de pecho y la pérdida de la cintura
En esta ocasión, la doctora Paula Rosso recomienda hacer uso de los tratamientos faciales con vitamina C, ya que hay que prevenir la aparición de manchas. Y es que, durante este periodo las hormonas provocan una mayor concentración de melanina y es habitual que aparezcan manchas en la frente, las mejillas y la parte superior del labio.
Por otro lado, es aconsejable utilizar protección solar siempre, ya que es la mejor forma de prevenir la aparición de manchas solares cuando la piel es especialmente propensa. Asimismo, durante esta etapa la circulación de retorno se ralentiza y es muy común tener las piernas y los pies hinchados; para evitarlo, nada como un drenaje linfático manual una vez por semana.
Por último, en el tercer trimestre, la retención de líquidos y la mala circulación dejan su huella tanto en el rostro como en las piernas, y salvo el pelo, que estará mejor que nunca, no es la etapa más favorecedora del embarazo. Es por esto que uno de los tratamientos recomendados en esta etapa es la limpieza facial que, si además se efectúa con movimientos drenantes y descongestivos que lleguen al contorno de los ojos, mucho mejor.
Los masajes también serán un estupendo aliado para aliviar dolores lumbares, las molestias en la espalda y para drenar. No obstante, la fisioterapia es la mejor opción para prevenir dolencias relacionadas con el embarazo como la ciática, el lumbago o las contracturas posturales.