A medida que pasan los años empezamos a notar en nuestro cuerpo una serie de ''problemas'' que hasta entonces eran unos desconocidos para nosotros. Es el caso de las varices, que se presentan sobre todo en las mujeres y, en menor medida, en los hombres.
Las varices son dilataciones de las venas producidas por múltiples factores como son la edad, el embarazo o la herencia genética. Lo que se produce es una alteración en el sistema vascular que afecta el retorno venoso y provoca la aparición de las denominadas “arañas vasculares”. Por todo esto, las varices se consideran un problema importante tanto estético como médico.
A pesar de ser un problema frecuente en la vida de muchas mujeres y hombres, existe un tratamiento que puede reducirlas y hacer que desaparezcan
¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DE LAS VARICES?
Una especie, como la humana, que tiene que pagar tributo por haber adoptado la postura bípeda y por ello, las estructuras que más se ven afectadas son las venas. Estas, en el transcurso de nuestra vida, acarrean un deterioro en su capacidad y eficacia de drenaje dando como resultado la dilatación de las mismas. Así, el peso de la columna sanguínea en su curso hacia el corazón, tarde o temprano, daña las venas volviéndolas insuficientes y tortuosas. Esa desestructuración anatómica y funcional de las venas la conocemos como variz o vena varicosa.
Pero el problema va todavía más allá porque las varices, al margen de deteriorar la calidad de vida, el confort estético y la funcionalidad de las extremidades inferiores, empeoran con los años y esto cierne sobre el portador de la enfermedad venosa otras amenazas no poco importantes que, incluso, pueden poner en riesgo la propia vida del individuo.
A pesar de ser un problema frecuente en la vida de muchas mujeres y hombres, existe un tratamiento que puede reducirlas y hacer que desaparezcan.
En Clínicas CRES usan la esclerosis de varices química, que es en la actualidad la técnica más utilizada. La esclerosis química también es conocida con el nombre de microesclerosis, al utilizar la inyección súper fina, tipo insulina durante su tratamiento, lo que permite evitar molestias al paciente. Consiste en inyectar en el interior de una variz una sustancia esclerosante, la cual produce la desaparición gradual de la misma. Es muy eficaz para varices de mediano o pequeño calibre.
Una vez que ya hemos realizado el tratamiento, se requiere la posterior aplicación de un vendaje sobre la zona tratada, que puede resultar un poco incómodo, pero que en muchos casos no hay que llevar más de 24 horas. Es normal que exista una ligera molestia en la zona esclerosada durante un tiempo.