Aunque a veces cueste creerlo, cada vez son más los hombres que se preocupan por su aspecto físico y recurren a la Medicina Estética para solucionar esos pequeños problemas físicos que les causan complejos.
Uno de ellos son los párpados, ya que, normalmente dedicamos mucho tiempo al cuidado de nuestro cuerpo, pero los párpados son los grandes olvidados en los cuidados de la rutina facial, a pesar de que su caída sea uno de los principales reflejos del envejecimiento.
Si lo padeces y no sabes qué hacer, esta es la solución perfecta: La blefaroplastia es un tipo de cirugía con la que se elimina el exceso de piel de los párpados para ampliar y rejuvenecer la mirada, manteniendo siempre la expresión y gesto, evitando el aspecto post operatorio de ojo redondo o excesivamente abierto.
La blefaroplastia es un tipo de cirugía con la que se elimina el exceso de piel de los párpados para ampliar y rejuvenecer la mirada
Esta intervención, que no siempre es estética y en ocasiones conlleva problemas asociados con la visión, es una de las mas demandadas por hombres.
Cada persona presenta unas necesidades diferentes, por lo que hay dos tipos de intervención:
- Párpado superior. Durante la operación se extirpa la piel excedente del párpado superior, incluidas las bolsas de grasa en caso de ser necesario. Requiere de especial cuidado y de gran precisión, puesto que una retirada en exceso podría provocar el resultado contrario al esperado.
- Párpado inferior. Consiste en eliminar las ojeras a través de la retirada de grasa de las tres bolsas ubicadas en la zona interior del ojo. Existen dos procesos, la cantopéxia que fija el canto externo del párpado para tensarlo y devolver un aspecto más elíptico y joven, y la TCA, un rejuvenecimiento cutáneo mediante la aplicación de ácido tricloroacético, consiguiendo una piel más juvenil y sin arrugas.
La operación se realiza con anestesia local y si solo influye al párpado superior, el régimen es ambulatorio. Sino puede requerir una estancia hospitalaria de 24 horas.