Aunque a menudo luzcamos un cabello perfectamente peinado, hay días que resulta más difícil de lo que parece. Todos hemos experimentado alguna vez un 'bad hair day' o, lo que es lo mismo, esos días en los que no sabemos qué hacer con nuestro pelo porque está encrespado, no tiene volumen, brillo o forma, el flequillo está rebelde o las raíces se están empezando a ensuciar.
Por suerte, existe solución para poder presumir de melena cuando más lo necesites gracias al champú en seco de Batiste. El principal uso de este champú es ayudar a mantener el aspecto limpio del cabello entre lavados o cuando tenemos una emergencia y no podemos lavarlo con normalidad. Además, también es la solución perfecta para quienes quieren dar más textura a sus peinados o fijarlos, sin necesidad de laca.
Aunque a menudo luzcamos un cabello perfectamente peinado, hay días que resulta más difícil de lo que parece
Y es que, el secreto de su éxito reside en una fórmula profesional a base de almidón de arroz que no contiene agua. De esta manera, se adapta a las necesidades particulares de cada tipo de cabello y actúa sobre el exceso de grasa eliminándola desde las raíces.
Así pues, con solo seguir 5 sencillos pasos, conseguirás aplicar de forma correcta el champú en seco para que tu pelo luzca en todo su esplendor. En este sentido, el primer paso es asegurarse de tener un cabello totalmente seco antes de aplicar el champú Batiste.
El segundo paso es separar el pelo por mechones y rociar el champú en seco a unos 20-30 centímetros de distancia, comenzando por los laterales y siguiendo por la zona superior. Se recomienda aplicar en raíces y cuero cabelludo, no en las puntas y cuerpo de cabello. El tercer paso es dejar que el champú actúe durante un par de minutos y utilizar los dedos para repartirlo de manera uniforme.
El cuarto paso es cepillar el cabello para eliminar los residuos del champú y evitar que se queden restos; y el quinto y último paso es utilizar el secador o las planchas para moldear el pelo y darle la forma y textura que desees.