Llega el verano más esperado. Después de más de un año de pandemia, todos queremos disfrutar de unas merecidas vacaciones. Nuestro rostro ha permanecido oculto tras la mascarilla, pero se acerca el momento de lucirlo. Tus aliados para borrar arrugas, corregir la flacidez y lucir una piel más joven son el bótox y el ácido hialurónico.
La doctora Gema Pérez Sevilla, cirujana maxilofacial y experta en medicina estética facial, nos desvela todos sus secretos.
TOXINA BOTULÍNICA PARA EL TERCIO SUPERIOR DEL ROSTRO
El bótox tiene la capacidad de relajar las fibras musculares, permitiendo así controlar la excesiva contracción de los músculos que producen las arrugas en la gesticulación. Se aplica sobre los músculos faciales cuya acción deseamos disminuir.
Su aplicación es sencilla y apenas dolorosa, porque se usan agujas de pequeño tamaño, lo que no suele provoca hematomas, solo una leve inflamación en el punto de inyección que desaparece en unos minutos. El paciente puede continuar con su vida habitual.
El bótox tiene la capacidad de relajar las fibras musculares, permitiendo así controlar la excesiva contracción de los músculos que producen las arrugas en la gesticulación
¿Dónde se puede aplicar? En frente, entrecejo y patas de gallo. La piel estará mucho más lisa, relajada y libre de arrugas, sobre todo en movimiento. Los resultados se aprecian desde la primera semana, pero pasados 10-15 es cuando se ven mejor.
ÁCIDO HIALURÓNICO PARA TRATAR ARRUGAS Y FLACIDEZ
El ácido hialurónico es el relleno estrella para el rejuvenecimiento facial. Es un producto natural, que está presente en nuestro organismo y que se tolera muy bien. Hidrata profundamente, porque llega a las capas más profundas, actuando como un auténtico ''andamio'' y promoviendo la producción de colágeno. Sirve para tratar las arrugas de todo el rostro, para reponer volúmenes perdidos y tensar los tejidos.
¿En qué consiste? El ácido hialurónico se inyecta usando agujas de pequeño calibre o cánulas finas a nivel subcutáneo o en el interior de la grasa facial. Se utiliza anestesia tópica para que sean menos dolorosas. El paciente puede continuar con su vida habitual.
¿Dónde se puede aplicar? En cejas, pómulos, mentón, mandíbula, labios, ojeras, surco nasogeniano, pliegue de amargura, cuello, arrugas del entrecejo, de la frente y patas de gallo.
El ácido hialurónico induce una regeneración de la piel en profundidad, además del efecto de corrección e hidratación, borrando las arrugas y tensando la piel para que se vea más firme y elástica.