“Perdón, ya cogí otro avión, aquí no vuelvo para otra decepción”, “tanto que te las das de campeón y cuando te necesitaba diste tu peor versión”, “una loba como yo no está pa tipos como tú” o “entendí que no es culpa mía que te critiquen, yo sólo hago música perdón que te sal-pique”. Estas son algunas de las frases envenenadas que la cantante Shakira ha mandado a su ex pareja Gerard Piqué en el lanzamiento de su última canción junto al productor Bizarrap.
La canción de la intérprete colombiana y el argentino ya acumula más de 29 millones de visualizaciones en YouTube, tan solo 14 horas después de su esperado estreno. Y es que, con esta ya son tres las canciones que la cantante le ha dedicado al futbolista ya retirado: “Te felicito”, “Monotonía” y esta última colaboración. Está claro que la ruptura con Piqué está siendo difícil de olvidar para Shakira.
Después de tantos meses en el foco mediático, si hay algo que no ha cambiado ha sido el gran estado físico de la colombiana con el paso de los años. Pero, ¿alguien se acuerda de cómo era la Shakira de los años 2000? Aquella que cantaba temas como “Ciega, sordomuda”, “Las de la intuición” o “Hips Don’t Lie”.
Shakira es sinónimo de éxito y el lanzamiento de este último tema no ha hecho más que confirmar lo que ya sabíamos: todo lo que toca, lo convierte en oro. Y entre tanto éxito, no es extraño que la cantante preste especial atención al cuidado de su imagen y su figura.
La colombiana que conocimos hace 30 años, no es para nada la misma que es ahora. Las operaciones estéticas han formado parte de su evolución musical. Atrás quedo la joven nacida en Barranquilla, ahora es una mujer más empoderada. Pero, ¿a qué operaciones se ha sometido la intérprete?
Entre las diferentes intervenciones quirúrgicas a las que se ha sometido, se pueden encontrar desde liposucciones en muslos y caderas, hasta una rinoplastia o una bichectomía.
¿EN QUÉ CONSISTE LA BICHECTOMÍA?
La bichectomía es una intervención que tiene como principal función cambiar el aspecto del rostro, eliminando las bolas de bichat, cúmulos de grasa que se tienen en las mejillas.
La operación consiste en disminuir el grosor de la mejilla para conseguir adelgazar la forma de la cara. Se puede realizar con anestesia local y no deja cicatrices visibles. Se trata de una intervención muy sencilla, que no requiere de mucho tiempo y que permite al paciente poder irse a casa.
En cuanto al postoperatorio, al ser una intervención en la que las cicatrices se encuentran dentro de la boca, es muy importante mantener una correcta higiene dental. Además, se recomienda aplicar frío para evitar el hinchazón, llevar dieta blanda y evitar practicar ejercicio.
¿Está recomendada para todo tipo de personas? No se recomienda para las personas que tienen una forma más alargada del rostro, poco relieve en el pómulo o mucha flacidez.