La astaxantina es un pigmento que se encuentra en el salmón, la trucha, las microalgas o los camarones y que tiene muchos beneficios para la salud, entre ellos el de reducir el estrés oxidativo y así tener una piel más sana. Es 10 veces más potente que la vitamina C, 14 veces más potente que la vitamina E y 54 veces más potente que cualquier otro betacaroteno.
Por eso, se ha convertido en el ingrediente cosmético de moda, ya que concentra un alto porcentaje antioxidante en cantidades mínimas y que es capaz de mantener los niveles de colágeno de la piel.
El aceite facial nutritivo destaca porque es un antiaging totalmente natural, con ingredientes 100% vegetales, envases 90% libres de plásticos, 0% Ftalatos y SIN. Entre sus componentes se encuentran una mezcla de aceites con la astaxantina.
¿Qué funciones tiene? Cabe destacar que los aceites que contienen no son ingredientes con una sola función. Al ser ingredientes naturales, suelen tener propiedades diferentes y varios de sus ingredientes tienen estudios de eficacia: escualano, tocoferol, aceite de jojoba, aceite de macadamia y fitoesteroles.
Asimismo, es un aceite muy ligero, de tacto seco y alta extensibilidad, que se absorbe rápida y fácilmente. Deja la piel suave y sedosa.