La ciudad pasa factura a la piel debido a la contaminación que hay en el ambiente. Sus efectos se ven reflejados en signos de la edad marcados, opacidad, tono desigual, manchas y falta de luminosidad.
Según Toñi Leal, Wellness Personal Assistant de hotel Royal Hideaway Sancti Petri, ''la baja calidad del aire acelera el proceso de envejecimiento natural de nuestra piel, reduciendo su barrera protectora y desequilibrando sus nutrientes''.
En este sentido, los expertos comentan que los radicales libres favorecen la aparición de arrugas y aumentan la falta de elasticidad, minimizando la cantidad de Vitaminas E y C y la cantidad de oxígeno del tejido, que aparece más apagado. ''Las pieles que sufren a diario condiciones medioambientales extremas demuestran un tono menos radiante y uniforme, con mayor flacidez y presencia de líneas de expresión'', explica Toñi Leal.
Por esta razón, el hotel Royal Hideway Sancti Petri apuesta por un tratamiento antipolución de la mano de la firma cosmeceútica Premium Perricone MD, con una propuesta que fusiona la apuesta wellness de este resort con la técnica, filosofía y productos de la que es una de las principales firmas premium de productos cosmeceúticos a nivel internacional.
El tratamiento consta de tres fases. La primera es la de activación corporal. Y es que, aunque se trata de un tratamiento facial, se inicia con una fusión entre masaje y ejercicio con movimientos cercanos al yoga y técnicas de respiración.
Los expertos comentan que los radicales libres favorecen la aparición de arrugas y aumentan la falta de elasticidad
¿Por qué? Ello se debe a que reactiva el organismo aumentando la oxigenación y potenciando la circulación de sangre, lo que permitirá que luego cada producto aplicado durante el masaje facial tenga una mayor asimilación por parte de nuestro organismo. La duración de este masaje, sumamente relajante, es de 45 minutos y se acompaña de técnicas de masaje relajante tradicional para que alcancemos el zénit de esa tranquilidad que tanto se echa de menos en la ciudad, y entremos en el facial con absoluta calma.
La fase dos es la de aplicación de productos que, aunque estos de adaptan según cada caso particular, existe un protocolo base que sirve normalmente a todo tipo de pieles, salvo que presenten problemas concretos.
Mediante técnicas de masaje, tapping y amasamiento, se sigue la siguiente rutina de aplicación de productos: limpieza facial con Citrus Facial Wash; peeling enzimático con Blue Plasma Peel; preparación de la piel con Cold Plasma Plus y Cold Plasma Eye Plus; purificación facial con Chloro Plasma, reducción de poros con Exfoliating Pore Refiner; e hidratación con Nourishing Moisturizer.
Finalmente, en la fase 3, el facial termina con la aplicación mediante técnicas de masaje de productos de la línea No Make-Up SkinCare de Perricone MD. Aliados con color que nutren nuestra piel mientras atacan y previenen los signos de la edad. Estos productos favorecerán que a la salida del facial estemos perfectas y radiantes sin necesidad de pasar por el tocador.