Una dermatitis atópica, el estrés o algún problema con nuestra glándula tiroides, pueden estar detrás de que estemos perdiendo pelo en nuestras cejas y pestañas, a lo que podríamos sumar también la llegada de la primavera, que no en todas las personas afecta de la misma manera. Por ello, Bárbara Torres, distribuidora en España de Nouveau Lashes, hace un repaso por las distintas soluciones y tratamientos para quienes padecen este tipo de alopecia.
En este sentido, las causas por las que en ocasiones perdemos el pelo en nuestras cejas y pestañas son multifactoriales. En primavera, no solo la sangre se altera, como suele decirse, también el metabolismo juega malas pasadas y el cortisol se revoluciona, provocando diversas molestias, entre ellas la alopecia temporal.
Una dermatitis atópica, el estrés o algún problema con nuestra glándula tiroides, pueden estar detrás de que estemos perdiendo pelo en nuestras cejas y pestañas
''En este época del año es cuando más notamos la demanda de extensiones en pestañas y el diseño de cejas, además de que llega el buen tiempo y hay una necesidad de lucirse tras cierto enclaustramiento durante el invierno. También existe el problema de la caída de pelo en ambas zonas, con razones muy diversas entre las que estarían el envejecimiento, el hipotiroidismo, la caída de párpados o una escasez natural y genética, que en el caso de las cejas puede mantenerse gracias a las paletas de colores y un buen sérum que hidrate, acondicione, fije y selle'', señala Bárbara Torres.
Así pues, si la alopecia se da por estrés, hagamos un esfuerzo por relajarnos y abrirnos al mundo del mindfulness, el yoga o el tai chi, además de realizar ejercicios de respiración diafragmática. Si tenemos un eccema, la solución es clara, consultar a un dermatólogo que nos asesore antes de que el problema se vuelva crónico y comiencen a aparecer picores y rojeces.
Igualmente, hay que tener mucho ojo con la depilación en la zona de las cejas, puede haber infecciones si no se realiza bien y posible inflamación que derive en la caída de pelo, como también debemos tener cuidado con cierto medicamentos, por ejemplo los prescritos para la artritis.
Por otro lado,se ha demostrado que llevar una alimentación rica en ácido fólico y vitaminas A y E es fundamental para prevenir este problema. Pueden encontrarse en los huevos, el brócoli, los dátiles, las espinacas, las acelgas, las zanahorias o las cebollas, entre otros. También se puede optar por masajes estimulantes con aceite de oliva antes de dormir así como limpiezas tibias con manzanilla.