Es raro la que no vuelve de vacaciones con rebrotes de acné o manchas solares (léntigos). ¿Por qué? ''El organismo fabrica, a través de enzimas y proteínas, antioxidantes endógenos para poder neutralizar el estrés oxidativo al que nos somete el sol. Pero, los rayos UV merman nuestras reservas, además de debilitar y fragmentar el colágeno, la elastina y el ácido hialurónico que producimos naturalmente'', advierte la médico-estético Paula Rosso. Precisamente, nuestra belleza y salud cutáneas dependen, en gran medida, de las reservas de antioxidantes, colágeno, elastina y ácido hialurónico que tengamos para hacerle frente.
Hay un envejecimiento intrínseco o biológico que es inevitable y está genéticamente determinado, y sobre el que no podemos actuar, pero existe otro extrínseco que se puede acelerar por determinados factores medioambientales, como los rayos UV, y sobre el que sí podemos intervenir.
¿Cómo podemos reponer estas sustancias? La redensificación de Teoxane ''es un tratamiento para la corrección y prevención del envejecimiento cutáneo que activa las funciones de las células de la piel proporcionando una mejora en la textura, la luminosidad, la elasticidad y la hidratación'', describe la cirujana general y médico-estético María Vicente.
Hay un envejecimiento intrínseco o biológico que es inevitable y está genéticamente determinado
Se realiza mediante microinyecciones o infiltraciones en abanico entre la dermis superficial y la dermis intermedia. Teoxane cuenta con un ácido hialurónico de alto peso molecular, no reticulado, que es prácticamente igual al que genera nuestro organismo. ''El relleno de redensificación de Teoxane proporciona la eficacia del ácido hialurónico a nivel hidratación, pero no de voluminización (no deja volumen ni relleno en las zonas tratadas), al tiempo que tiene efecto antioxidante y revierte los efectos del envejecimiento solar (manchas, arrugas y flacidez)'', asegura Paula Rosso.
¿Para quién? Es apto tanto para pieles jóvenes como para maduras. A edades tempranas, alrededor de los 30 años, ayuda a ralentizar la aparición de los signos de envejecimiento cutáneo. ''Al redensificar la dermis se mejora la calidad de la piel, quedando más tersa y luminosa, y, además, aporta un extra de hidratación para atenuar las líneas de expresión'', apunta Paula Rosso. Y cuando se aplica en pacientes más maduras, a partir de los 45 años, es como darle una segunda oportunidad a la piel: ''aporta hidratación, vitalidad y un efecto tensor, además de ayudar a combatir los signos del fotoenvejecimiento'', según la doctora Vicente.
Es un tratamiento para rejuvenecer la cara de bajo impacto, ya que mejora la piel sin cambiar el aspecto. ''A partir de los primeros 10 días se nota una redensificación de la piel debido a la nueva producción de fibras de colágeno y elastina y una reparación cutánea. Este efecto perdura entre 6 y 9 meses'', según la doctora Rosso. A corto plazo se aprecia una hidratación profunda, una piel más uniforme y luminosa, y una mejora de la calidad cutánea (disminuye la rugosidad y la textura se vuele más suave). Y a largo plazo mejora la densidad de la piel, las líneas de expresión, la firmeza y elasticidad gracias a la producción de colágeno y elastina nuevos.