Uno de los aspectos que más nos preocupan respecto al cuidado de la piel es la apariencia luminosa, ya que no es sólo un motivo estético, sino que es indicativo de salud. Sin embargo, no debemos confundir un cutis brillante y radiante con el brillo seborreico, ya que esto último es indicativo de un exceso de producción del sebo cutáneo, que no deja de ser el responsable de los brotes de acné e imperfecciones.
En cambio, una piel luminosa se caracteriza por un tono uniforme del rostro, con una textura suave y un resplandor equilibrado, que se consigue con una limpieza e hidratación adecuadas. No obstante, la circulación sanguínea también tiene mucho que ver en esto, así como otros factores que inciden en el bienestar de la piel. Te los contamos de la mano de Cuca Miquel, coach de Belleza, cosmética y dermofarmacia y CEO del Centro de Estética Todo en Belleza.
FACTORES QUE INFLUYEN EN LA PIEL LUMINOSA
Cuida los siguientes elementos en tu rutina diaria para favorecer un rostro radiante y luminoso:
- Hidratación. Una piel sin humedad y con falta de hidratación tendrá un tono más apagado, así como podrá sentirse más áspera y con descamaciones provocadas por la sequedad. De ahí la importancia de incorporar al skincare una crema humectante e hidratante de aplicación diaria.
- Exfoliación. Este paso es clave para desobstruir los poros, eliminando la suciedad y las células muertas en profundidad. Una piel limpia contribuirá a que el cuerpo genere nuevas células y más saludables, eliminando ese aspecto grisáceo.
- Circulación sanguínea. Estimular la circulación de la sangre en el cutis hace que las células reciban mayor cantidad de nutrientes y oxígeno, previniendo así la muerte celular y favoreciendo la regeneración de los tejidos. Esto también tendrá un resultado positivo en la apariencia y luminosidad del rostro.
- Cuidado de la piel. Incorpora a tu rutina productos que se adapten a tus necesidades y a tu tipo de piel para remediar los problemas y no alterar tu barrera cutánea. Por ejemplo, si tienes la piel grasa, deberás optar por productos no comedogénicos para evitar el exceso de producción de sebo.
Un cutis perfectamente limpio es importante para “tener una piel sana y libre de imperfecciones y acné”
- Ingredientes específicos: más allá de una hidratación diaria, debemos incorporar productos para el cuidado de la piel con ingredientes específicos que combatan los principales problemas cutáneos, como por ejemplo, los causantes del envejecimiento: antioxidantes, vitamina C y ácido hialurónico.
- Protección solar. El daño solar ataca los 365 días del año, aunque el sol incida con más fuerza en los meses de verano. El protector solar ayuda a prevenir los efectos nocivos de los rayos, así como también podemos encontrar algunos protectores con función despimentante e hidratante para atajar varios problemas con un solo producto.
- Estilo de vida saludable. Una rutina saludable, conformada por una alimentación variada y equilibrada, ejercicio regular, descanso nocturno y bajos niveles de estrés ayuda a combatir el estrés oxidativo y a lucir un cutis radiante.
- Distinguir entre luminosidad y exceso de brillo: como indicábamos anteriormente, la luz es deseable, ya que se trata de un resplandor saludable que proviene de una piel equilibrada y bien cuidada. No obstante, un exceso de brillo podría indicar una mayor producción de sudor o grasa de nuestras glándulas, que acaba obstruyendo los poros y desencadenando otros problemas.
TRATAMIENTOS RECOMENDADOS
Cuca Miquel propone dos tratamientos para averiguar en qué estado se encuentra nuestra dermis y trabajarla para lograr un aspecto radiante y luminoso:
- Estudio de la piel: antes de someterse a cualquier tratamiento, debemos identificar nuestro tipo de piel para ajustar la técnica o procedimiento recomendado. Con un equipo de diagnóstico se detectan posibles anomalías y carencias de nuestro tejido cutáneo y, posteriormente, un experto evalúa los resultados para explicar al paciente las causas de la problemática y recomendar el protocolo cosmético adecuado.
- Limpieza facial personalizada: consiste en higienizar la piel mediante la técnica que más se ajuste a las necesidades de cada paciente. Desde el centro estético de Cuca, utilizan activos naturales extraídos del mar, de las flores, frutas y plantas, con formulaciones que garantizan eficacia y seguridad, atendiendo a las normativas de seguridad sanitaria y de protección al medio ambiente. Como señala la experta, un cutis perfectamente limpio es importante para “tener una piel sana y libre de imperfecciones y acné”, que, en definitiva, nos dará ese aspecto brillante que estamos buscando.