En España todavía no existe una Estrategia Nacional de Investigación en Cáncer. Si bien en nuestro país disponemos de una estrategia general para el abordaje de esta patología, que fue además aprobada por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el 24 de febrero de 2021, la falta de un plan de investigación es evidente.
La Dra. Marisol Soengas, presidenta de ASEICA y jefa de grupo de Melanoma en el CNIO, opina al respecto que, "para la comunidad científica, es frustrante que se insista una y otra vez en el valor y la relevancia la ciencia y la investigación (por ejemplo, en campañas electorales), pero luego, las políticas científicas se planteen de modo generalmente cortoplacista". Se reclama también al Ministerio de Ciencia e Innovación, una mayor planificación a largo plazo "que nos permita acercarnos a la media europea del 2.4% del PIB".
Asimismo, la experta hace alusión a la reforma de Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación aprobada en el Congreso el año pasado. "Es un paso adelante en impulsar el apoyo a la I+D+i, pero las medidas presupuestarias presentadas están ligadas a proyectos europeos de resiliencia y son por tanto temporales. Esta nueva Ley de la Ciencia 17/2022 incluye también planes para mejorar el desarrollo profesional de los investigadores e investigadoras, pero estas propuestas todavía no se han implementado de modo que supongan un avance significativo".
Se insiste una y otra vez en el valor y la relevancia la ciencia y la investigación pero luego las políticas científicas se planteen de modo cortoplacista
Por eso se hace evidente la necesidad de crear un plan nacional de investigación. ASEICA "lleva años insistiendo en este punto", recuerda Soengas. En el año 2018, se reclamó por parte de la entidad un Pacto de Estado conjuntamente con la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), para promover una mejor coordinación entre la investigación básica y clínica en oncología.
Ya en aquel momento se solicitaba doblar las partidas financieras para la ciencia y la innovación, así como cambios asistenciales y reformas organizativas "que permitiesen el desarrollo e implantación de una medicina personalizada a la que pudiesen acceder de modo equitativo todos los pacientes, independientemente de su localización geográfica". Al respecto a demás de la localización geográfica, uno de los efectos de la falta de un plan nacional es precisamente la desigualdad y la inequidad entre comunidades.
"Las desigualdades entre CCAA están determinadas por muchos factores. La falta de un Pacto por la Ciencia es uno de ellos". Además, la experta reclama también la falta de una estructura organizativa, lo que conlleva que la financiación propia destinada a la I+D+I sea muy diferente. Por ejemplo, "Cataluña y el País Vasco han desarrollado programa como ICREA e Ikerbasque, con convocatorias e incentivos muy atractivos que están consiguiendo grandes resultados en la atracción y retención de talento investigador, nacional e internacional".
Las desigualdades entre CCAA están determinadas por muchos factores. La falta de un Pacto por la Ciencia es uno de ellos
Desde ASEICA también se presentó en el año 2020, junto con ASEBIO (Asociación Española de Empresas de Biotecnoloía) y SOMMa (Alianza de Centros Severo Ochoa y Unidades de Excelencia María de Maetzu), una Estrategia a Largo Plazo por la Ciencia y la Innovación en España. Igualmente, en Abril del 2023, también junto a SEOM, se presentó un Decálogo de Propuestas para Mejorar la Innovación y el Emprendimiento en este país, una asignatura todavía pendiente. Ya el próximo 26 de Septiembre ASEICA propondrá medidas concretas para apoyar al colectivo médico-investigador, que sufre también grandes limitaciones administrativas y financieras.
Sin duda, una planificación nacional y coordinada, traducida en un Pacto por la Ciencia, "proporcionaría continuidad y estabilidad al sistema de investigación". No obstante, añade Soengas, si este pacto no está acompañado por reformas importantes tanto en aspectos administrativos y burocráticos, como en la financiación y en procesos de evaluación y revisión, no será efectivo. "En cuanto al cáncer, es importante asegurar que puedan desarrollarse e implementarse nuevas terapias. La equidad en el diagnóstico y en el tratamiento es esencial".
En definitiva, se recalca que, en España, existen centros y grupos de investigación con una financiación sólida, "pero son muy puntuales". Realmente, afirma la presidenta de ASEICA, se trabaja con un esfuerzo "ímprobo" para poder conseguir resultados competitivos en un contexto en el que se priman estudios colaborativos con grandes cantidades de muestras y con tecnologías punteras. "Se necesita por tanto un esfuerzo global para que España ocupe el puesto que merece por su talento y capacidades, en investigación básica, clínica y traslacional", concluye.