La EPOC afecta a cerca de 3 millones de personas en España y hoy, en el Día Mundial de esta enfermedad, la Dra. Ana Santiago Recuerda, jefa de la Sección de Cuidados Respiratorios Intermedios del Servicio de Neumología del Hospital Universitario La Paz, explica en una entrevista de ConSalud Podcasts cómo influye en el día a día de quienes la padecen y los avances terapéuticos actuales para mejorar su calidad de vida.
“El paciente con EPOC tiene ahogo o disnea y eso hace que deje de hacer cosas que habitualmente hacía, como ejercicio o simplemente salir”, comenta la Dra. Santiago. Este ahogo produce que el paciente se vuelva más sedentario, lo que, a su vez, empeora la capacidad pulmonar y genera un círculo vicioso. “Al hacer menos ejercicio, cuando lo intenta, el ahogo es mayor”, explica.
Por otra parte, las exacerbaciones, crisis que a menudo requieren hospitalización, son otro reto significativo para los pacientes, ya que suponen un descenso en el estado general de salud que luego cuesta remontar. “Cuando tiene una infección respiratoria, acude a urgencias o ingresa, luego le va a costar remontar para volver al mismo escalón en el que estaba antes”, añade la especialista.
“El abanico de opciones terapéuticas disponible es muy amplio y se puede adaptar a cada paciente”
No obstante, la Dra. Santiago subraya que, actualmente, existen múltiples opciones para tratar la EPOC y mejorar la calidad de vida del paciente, siendo el abandono del hábito tabáquico la primera medida fundamental. “Solo dejando de fumar vemos que la curva de función respiratoria, en vez de ser en picado, se convierte en una curva de disminución más lenta”, asegura.
Otros tratamientos incluyen la nutrición adecuada, los broncodilatadores adaptados a cada caso, la rehabilitación respiratoria, el oxígeno y, en etapas avanzadas, la ventilación no invasiva. “El abanico que hay disponible es muy amplio, y van por escalones”, afirma la especialista, quien señala la importancia de adaptar los tratamientos a la progresión individual de cada paciente.
Detectar la EPOC en etapas tempranas es clave para modificar su evolución. “Podemos cambiar la historia natural de la enfermedad si la tratamos precozmente”, sostiene la Dra. Santiago. Desde frenar la progresión del ahogo hasta reducir las exacerbaciones. También hace posible administrar vacunas, como las de la gripe, la neumonía o el COVID, antes de que la enfermedad avance.
Por ello, la Dra. Santiago propone el cribado poblacional como un método eficaz para la detección temprana de la EPOC: “Lo ideal sería hacer una espirometría en los fumadores o en la población a partir de los 50 años, similar a lo que se hace en el cáncer de colon”. La neumóloga también recalca la necesidad de formar a los médicos de atención primaria para realizar e interpretar espirometrías, una medida impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que podría marcar el camino a seguir.
Esta entrevista está disponible en las plataformas Ivoox y Soundcloud.